A unos días de cumplirse tres meses de la invasión rusa a Ucrania, el ejército de Vladimir Putin comenzó este viernes un ataque a las ciudades de Lysychansk y Severodonetsk en Luhansk, una región del este del país, aseguraron las autoridades.
A través de un mensaje publicado en la aplicación Telegram, el gobernador Serhiy Haidai señaló que la ofensiva causó la muerte de 12 personas en Severodonetsk y destruyó más de 60 viviendas en la región.
Sin embargo, el funcionario ucraniano aseguró que el ataque sobre Severodonetsk “no tuvo éxito. Los rusos sufrieron bajas personales y se retiraron”, afirmó.
Sus declaraciones no han podido verificarse de forma independiente.
Por otra parte, el Estado Mayor ucraniano dijo este 20 de mayo en su reporte diario que las tropas de Moscú trataron de asaltar Severodonetsk, pero sufrieron bajas y se retiraron.
Se intensifican ataques en Donbás
Asimismo, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, aseguró que las tropas rusas están intensificando sus ataques en el Donbás.
“Aquello es un infierno y no es una exageración”, afirmó el mandatario en su discurso nocturno a la nación. “El bombardeo brutal y totalmente sin sentido de Severodonetsk. Doce muertos y docenas de heridos allí en un solo día”.
Según Zelenskyy, los ataques rusos en la región nororiental de Cherníhiv incluyeron una terrible ofensiva sobre la aldea de Desna, donde había muchos muertos y los rescatistas seguían trabajando entre los escombros.
“Los bombardeos y ataques a nuestras ciudades, los ataques aéreos y con misiles del ejército ruso, no son simples operaciones militares en tiempos de guerra... Es un intento consciente y criminal de matar al mayor número de ucranianos posible”, agregó Zelenskyy.
“De destruir más viviendas, espacios públicos, negocios. Esto es lo que se considerará un genocidio del pueblo ucraniano por el que, definitivamente, los ocupantes serán llevados ante la justicia”.