BRASILIA.- El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, lanzó su candidatura a la reelección con el apoyo del Partido Liberal, que lo oficializó para tomar parte en las elecciones del próximo 2 de octubre. En el evento también se dio a conocer su compañero de fórmula, el exministro de Defensa Walter Braga Netto.
En este primer acto, su equipo de campaña intentará mantener a Bolsonaro enfocado en una agenda propositiva para acortar distancias con Luiz Inácio Lula da Silva, lo que se ha visto reflejado en las últimas encuestas sobre intención de voto, que tienen al candidato del Partido de los Trabajadores (PT) como favorito para ganar la Presidencia.
La consultora Datafolha, en junio, mostró a Lula con 47 por ciento de intención de voto, seguido por 28 por ciento de Bolsonaro.
Asesores del mandatario le han recomendado enfocarse en una agenda centrada en la economía y los esfuerzos del gobierno por disminuir los precios de los combustibles y por reforzar ayudas sociales, y abandonar polémicas, como los ataques a las urnas electrónicas. Del mismo modo, intentan “ablandar” su imagen y mostrarlo menos furioso.
Sin embargo, Bolsonaro lanzó su candidatura a la reelección, en un acto en Río de Janeiro marcado por violentos ataques a la máxima corte de justicia, críticas a Lula y un tono belicoso que pareció ignorar los consejos de su equipo de campaña.
El mandatario usó el evento como plataforma para convocar a sus seguidores a “salir a las calles por última vez” el 7 de septiembre, fecha en que el año pasado hubo manifestaciones marcadas por consignas antidemocráticas.
Bolsonaro dijo que pide a Dios “que Brasil nunca experimente los dolores del comunismo”, en una referencia al expresidente izquierdista Lula, a quien, sin nombrarlo, acusó de querer cercenar libertades si regresa al poder en las elecciones de octubre, en las que es claro favorito.