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Haití: Docenas de personas son alcanzadas por balas perdidas

Los equipos médicos realizaron 150 consultas, 30 de ellas para personas con heridas infectadas, es decir, heridas antiguas que no habían sido tratadas antes.

Esta menor resultó herida en el hombro izquierdo por una bala perdida cuando se dirigía a su casa en Fontamara. Las heridas de balas perdidas son cada vez más frecuentes en Puerto Príncipe. (MSF). (SabiN/MSF)

Desde el fin de semana pasado, Médicos Sin Fronteras (MSF) ha visto un aumento significativo en el número de pacientes heridos por balas perdidas en sus instalaciones médicas en Puerto Príncipe, Haití.

Desde el inicio de los violentos enfrentamientos entre grupos armados en los barrios periféricos, el personal en el Centro de Emergencias de MSF en Turgeau ha atendido a casi 80 personas con heridas de bala, la mayoría causadas por balas perdidas.

“Estos pacientes solo representan un pequeño número de las víctimas. Moverse se ha vuelto extremadamente peligroso en varias áreas de la ciudad, y muchos habitantes están atrapados en sus barrios. Esto ha hecho que el acceso a la atención médica sea muy difícil, por lo que MSF está gestionando clínicas móviles para llegar a las personas que no pueden movilizarse. Pero incluso nuestros equipos médicos enfrentan dificultades, al menos en tres ocasiones, nuestras clínicas móviles tuvieron que ser pospuestas o canceladas debido a los enfrentamientos”, explica Rachelle Seguin, coordinadora médica de MSF en Haití.

En el barrio de Cité Soleil, una clínica móvil de MSF llegó a la zona durante un alto el fuego. En pocas horas, nuestros equipos médicos realizaron 150 consultas, 30 de ellas para personas con heridas infectadas, es decir, heridas antiguas que no habían sido tratadas antes.


Es probable que esto se deba a que las personas heridas no pudieron recibir atención médica, por la intensidad de los combates en curso o porque los grupos armados levantaron barricadas y bloqueos carreteros. En algunas áreas, MSF solo puede tratar a los pacientes en sótanos o habitaciones sin ventanas debido al peligro que supone el fuego cruzado y las balas perdidas.

Desde que aumentó la violencia en varias áreas de Puerto Príncipe (tanto en Cité Soleil, Martissant o, más recientemente, Bel Air, Bas Delmas y las afueras del centro de la ciudad), MSF ha visto que va acompañada de una disminución en las consultas ambulatorias. .

“Un año después de que tuviéramos que cerrar nuestro Centro de Emergencias en Martissant a causa de la violencia y trasladarlo a Turgeau, reiteramos nuestros llamados: la población de Puerto Príncipe debe estar a salvo de la violencia y tener acceso a la atención médica y servicios básicos”, asevera Benoît Vasseur, jefe de misión de Médicos Sin Fronteras en Haití. “Nos preocupa mucho que las zonas de conflicto en la capital haitiana y sus alrededores se sigan extendiendo”.

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