Joe Biden, presidente de Estados Unidos, dijo desconocer el contenido de los documentos clasificados encontrados en su oficina este martes 10 de enero.
“La gente sabe que yo manejo documentos clasificados con toda seguridad”, aseguró Biden, quien dijo que él era el primer sorprendido con la noticia.
“Mis abogados encontraron documentos en una caja. De inmediato se dieron cuenta que habían documentos clasificados e hicieron lo que debían hacer: notificarlos”, comentó.
El mandatario respondió a la polémica desde el Palacio Nacional de la Ciudad de México, en el marco de la Cumbre de Líderes de América del Norte, junto al presidente Andrés Manuel López Obrador y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.
Dijo que sus abogados le recomendaron no preguntar acerca del contenido de los documentos, y que con su administración ya cooperan para esclarecer la situación.
“Encontraron unos documentos en una caja, en un gabinete o en un ropero y cuando lo encontraron se dieron cuenta de que había varios documentos secretos en esa caja, hicieron lo que debían haber hecho, llamaron a los archivos inmediatamente, les entregaron los documentos a los Archivos (Nacionales)”, afirmó Biden.
El hallazgo de los documentos ha confrontado a los demócratas y los republicanos en el Congreso.
Los demócratas han acusado a los republicanos de “estar solamente interesados en oponerse al presidente”, puesto que cuando el FBI registró la residencia del exmandatario Donald Trump (2017-2021) en Mar-a-Lago (Florida) en agosto pasado “le restaron importancia” al asunto.
Mientras que la Cámara Baja de Estados Unidos, bajo el liderazgo de los republicanos, aprobó este martes crear un comité que investigue al Departamento de Justicia y al FBI por el supuesto uso partidista de las agencias gubernamentales por parte de Biden.
Según The Washington Post, que cita fuentes anónimas, el FBI también se encuentra involucrado en la investigación, que se refiere a unos diez documentos encontrados en la oficina, que Biden usó regularmente entre 2017 y el lanzamiento de su campaña presidencial en 2020.
El caso, aunque según medios estadounidenses guarda pocas similitudes, recuerda al de Trump y lo que ocurrió en Mar-a-Lago, aunque en esa ocasión fue necesaria la intervención del Departamento de Justicia y del FBI para recuperar los papeles.
Con información de EFE.