Se debe recomendar a los pasajeros de vuelos de larga distancia que usen cubrebocas y no es descabellado que Europa adopte restricciones de viaje a medida que aumentan los casos de COVID-19 en China y Estados Unidos, dijeron funcionarios de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Una amenaza podría provenir de una nueva variante de preocupación en cualquier momento y lugar”, dijo Hans Kluge, director regional de la OMS para Europa, en una sesión informativa en Copenhague.
Kluge instó a los países europeos a intensificar su monitoreo y dijo que la agencia de salud necesita información detallada y periódica para navegar por la pandemia en su cuarto año.
El número de secuencias genéticas enviadas a la OMS desde Europa ha descendido a 90 mil en las últimas cinco semanas de 2022, frente a los 1.2 millones de las cinco primeras semanas del año.
China también debe proporcionar información, dijo Kluge. La cifra oficial de muertos desde que el país abandonó abruptamente su política COVID CERO a principios de diciembre sigue siendo inferior a 40, a pesar de los informes de crematorios y residencias de ancianos desbordados, lo que ha provocado un escepticismo generalizado sobre las estimaciones oficiales.
La definición china de las muertes por coronavirus es “muy estrecha” y no cumple necesariamente las normas de la OMS, afirmó en la presentación Catherine Smallwood, funcionaria superior de emergencias.
Un panel de expertos está estudiando actualmente si la variante XBB.1.5 debería considerarse una variante preocupante, según Smallwood. En Europa se están detectando casos de esta subvariante en pequeñas cantidades, pero cada vez mayores.
No se espera que el aumento de COVID en China afecte significativamente la propagación de la enfermedad en Europa, dijo Kluge. Los países que introducen restricciones de viaje y otras medidas deben asegurarse de que sean proporcionadas y no discriminatorias, agregó.