Los precios de las gasolinas están aumentando en Colorado debido a que una interrupción prolongada de la única refinería de petróleo del estado afecta a los lugareños y a los turistas de esquí.
Es probable que los costos permanezcan elevados hasta después de la temporada alta del verano.
La interrupción en la refinería de Commerce City de Suncor Energy, que es responsable de 40 por ciento del combustible del estado, ha hecho que los suministros estén “extremadamente ajustados”.
Algunos negocios minoristas enfrentan escasez temporal de combustibles como la gasolina premium utilizada para los automóviles de lujo, explicó Grier Bailey, director ejecutivo de la Asociación de Comercializadores de Petróleo de Colorado Wyoming.
Ubicada en las afueras de Denver, la instalación permanecerá inactiva hasta finales del primer trimestre de 2023 después de que un incendio la obligó a cerrar en los últimos días de 2022. La interrupción ha provocado demoras en los camiones y largas filas en las terminales de combustible, admitió el distribuidor Mansfield Energy.
Los precios minoristas promedio en Colorado ahora se ubican en los 3.249 dólares por galón, después de haber subido más de 7 centavos durante la noche, liderando las ganancias nacionales, según el club de autos AAA.
Los precios se mantendrán altos hasta que la región haga la transición a un combustible de invierno más barato en septiembre, incluso si la refinería regresa a producir en marzo, advirtió Bailey.
Los precios de la gasolina también están aumentando en la vecina Utah, donde el turismo de invierno también es fundamental para la economía del estado. La refinería de Salt Lake City se encuentra entre las plantas que ahora envían más productos a Colorado para llenar el vacío de suministro, según Bailey.