Guatemala elegirá este domingo al presidente número 52 de su historia, con el balotaje entre la ex primera dama (2008-2012) Sandra Torres Casanova y el académico progresista Bernardo Arévalo de León, en medio de un clima de incertidumbre.
Los 9.3 millones de guatemaltecos convocados para asistir a las urnas deben decidir si Torres Casanova, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), será la primera mujer que gobierne el país o si Arévalo de León, del Movimiento Semilla, se convertirá en el primer mandatario progresista en la historia de la nación centroamericana.
El actual proceso electoral ha sido el más controversial de Guatemala desde la implementación de la democracia en 1986 y ha sido empañado por el protagonismo del Ministerio Público (Fiscalía) que, desde el 12 de julio, ha intentado cancelar al Movimiento Semilla e impedir la participación de Arévalo de León.
De acuerdo con expertos consultados por EFE, en estas elecciones está en juego la continuidad de un sistema que ha debilitado la democracia y que ha garantizado impunidad de políticos tradicionales del país centroamericano.
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Torres Casanova, de 67 años, es una experimentada política que confía en sus alianzas con alcaldes de diferentes regiones del país y en la estructura rural que ha construido su partido desde hace más de 15 años para ganar la elección.
La exprimera dama perdió los balotajes de 2015 y 2019 y, según expertos, su pasado ligado a casos de corrupción genera un fuerte anti voto en las zonas urbanas del país.
En la primera vuelta, del 25 de junio, Torres Casanova se afianzó el primer lugar con casi 900 mil votos, que representaron un 15 por ciento del electorado.
Por su parte, Arévalo de León, de 64 años, impulsado por una propuesta anticorrupción y la imagen de su padre, el expresidente Juan José Arévalo Bermejo (1945-1951), sorprendió el 25 junio al conseguir el segundo lugar con más de 600 mil votos, pese a que las encuestas lo colocaban en el octavo lugar.
Su avance provocó que el Ministerio Público, conformado por fiscales sancionados por corrupción por Estados Unidos, iniciara una cruzada de órdenes de captura e intentos de cancelación del partido por un supuesto caso de anomalías en el proceso de inscripción del Movimiento Semilla en 2018.
En la semana previa al balotaje, las encuestas colocan a Arévalo de León como favorito con el 61 por ciento de la intención de voto, mientras que Torres Casanova acumula el 37 por ciento.
Tensión e incertidumbre
El fiscal Rafael Curruchiche, encargado del caso contra Semilla, no descartó que después del balotaje por la presidencia emita órdenes de captura y solicitudes de antejuicio contra miembros del partido por el supuesto caso de corrupción.
La Organización de Estados Americanos (OEA) y el Departamento de Estado de los Estados Unidos encabezan a los actores internacionales que han pedido “respetar la voluntad popular” que sea expresada en las urnas del país centroamericano.
Hace dos días, Arévalo de León aseguró que “después de ganar la elección, los corruptos harán cualquier cosa” para evitar que pueda asumir el poder el 14 de enero próximo.
El ganador de la elección asumirá de 2024 a 2028 la Presidencia y sustituirá a la Administración que preside Alejandro Giammattei, un político conservador que durante su Gobierno ha sido vinculado a docenas de casos de sobornos y corrupción.