Al menos dos personas murieron en El Salvador arrastrados por las crecidas de ríos debido a las torrenciales lluvias provocadas por la tormenta tropical Pilar, informaron autoridades de Protección Civil este 30 de octubre.
Los fallecidos son un hombre y una mujer que fueron tragados por ríos el domingo en el departamento de La Unión. Sus cuerpos sin vida fueron localizados la mañana de este lunes, informó Fermín Pérez, director general de Protección Civil.
El hombre fue identificado como Mario Salomón Villatoro, de 24 años y se lo llevó la corriente en la quebrada del Caserío Upire, en el cantón Montuca, jurisdicción de Nueva Esparta, La Unión, mientras que en el caso de la mujer, identificada como Candelaria Hernández, de 57 años, el siniestro ocurrió en el cantón Los Cedros de Anamorós, también del departamento de La Unión.
“Pedimos evitar cruzar ríos o cualquier corriente de agua que se genere a causa de lluvias o tormentas posterior a éstas, debido al arrastre”, manifestó Pérez en conferencia de prensa.
Tormenta tropical ‘Pilar’: El Salvador declara emergencia nacional
Pilar representa riesgos de fuertes lluvias e inundaciones repentinas en El Salvador y otras partes de Centroamérica debido a su ubicación actual de este lunes.
Se prevé que la tormenta mantenga esa trayectoria general durante uno o dos días, se detenga un día o más justo frente a la costa y luego gire abruptamente y regrese al mar sin tocar tierra.
El Observatorio de Amenazas del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales de El Salvador (MARN) señaló que, aunque la trayectoria de Pilar es hacia la costa salvadoreña, existe una alta presión que empujará un frente frío alcanzando el norte de Yucatán.
Este sistema frontal limitará el avance de la tormenta tropical Pilar, provocando un retroceso hacia aguas del Pacífico, indica el informe.
El domingo, las autoridades de El Salvador emitieron una alerta roja debido a las lluvias asociadas a Pilar.
A petición del presidente Nayib Bukele, el Congreso salvadoreño declaró emergencia nacional ante el riesgo o peligro por el desastre para las personas, sus bienes, servicios públicos y el ecosistema.
El decreto faculta a la Dirección General de Protección Civil para ordenar la evacuación obligatoria de la población en riesgo, lo que implica el “uso de los mecanismos coercitivos necesarios con el fin de proteger al derecho a la vida”.
El Ministerio de Educación suspendió las clases presenciales y virtuales y demás actividades académicas a nivel nacional hasta el miércoles 1 de noviembre. En tanto, el ministro de Gobernación, Juan Carlos Bidegain, informó que se instalaron 100 albergues para atender a la población que necesite protección.
Las autoridades salvadoreñas señalaron que la pesca artesanal, industrial y deportiva, así como las actividades de recreación en ríos, playas y lagos quedan suspendidas hasta el 1 de noviembre.