El Ejército israelí aseguró haber transferido a los fondos del Estado unos 15 millones de shékels israelíes (unos 3.7 millones de euros) hallados en instalaciones en la Franja de Gaza asociadas al grupo islamista Hamás, que controla el enclave desde 2007.
“Las Fuerzas de Defensa de Israel confiscaron los fondos en varios lugares, incluidos los cuarteles generales de Hamás y las oficinas en las que se encontraban en activo individuos perseguidos y asociados con Hamás”, informó el Ministerio de Defensa en un comunicado.
Además de shékels, también fueron recuperados “un millón de dólares, así como dinero iraquí, dinares jordanos y libras egipcias”, detalla el texto.
Desde el comienzo de la guerra en Gaza, tras el ataque perpetrado por Hamás el 7 de octubre en el que murieron más de mil 200 personas, tropas israelíes dicen haber incautado más de 20 millones de shékels (unos 4.8 millones de euros) en bastiones de los yihadistas.
El Ejército israelí informó hoy sobre el descubrimiento de un gran túnel bajo Jan Yunis, en el sur, donde encontraron pruebas de que allí habían escondido a alguno de los 240 secuestrados que retuvieron el 7 de octubre en Israel.
La guerra en Gaza cumple hoy 107 días de ofensiva, con un total de 25 mil 105 personas asesinadas por Israel, entre ellos unos 9 mil combatientes y el resto mujeres y niños, según cifras del propio Ejército israelí, y más de 62 mil 600 heridos, de acuerdo con los últimos datos divulgados este domingo por el Ministerio de Sanidad gazatí.
Los ataques aéreos persisten tanto en el norte de la Franja -de donde ya huyó la mayoría de la población salvo unas 200 mil personas- como en el sur, en torno a la ciudad de Jan Yunis, con intensos ataques de artillería en el barrio de Al Manara, y bombardeos en la zona oeste de Al Amal, que causaron un muerto y varios heridos, según informó anoche la agencia de noticias palestina Wafa.
En Rafah, la zona más al sur del enclave, se concentran más de un millón de los casi dos millones de desplazados internos, mientras que en el norte unas 800 mil personas tienen dificultades para acceder a comida, agua, ayuda humanitaria o suministros básicos como medicinas, según Naciones Unidas y la Media Luna Roja.