La precandidata presidencial republicana, Nikki Haley, está brindando su apoyo a una legislación que permitiría a Estados Unidos confiscar activos soberanos rusos para pagar la reconstrucción de Ucrania, mientras intensifica sus ataques en política exterior contra el favorito del Partido Republicano, Donald Trump.
El presidente ruso Vladímir Putin “es un criminal de guerra y un matón que invadió un país libre”, dijo Haley en una declaración a Bloomberg News, y agregó que no debería cuestionarse si debería “pagar el precio por sus acciones”.
La postura de Haley la coloca en la misma página que el presidente Joe Biden, cuya Casa Blanca señaló que apoya la legislación.
El mes pasado, el Comité de Relaciones Exteriores del Senado votó 20 a 1 a favor del proyecto de ley, que permitiría al poder ejecutivo confiscar parte de los 300 mil millones de dólares en activos soberanos rusos congelados después de que las fuerzas de Putin invadieran Ucrania hace dos años.
Haley respalda ayuda a Ucrania
El proyecto de ley incluso cuenta con el apoyo de algunos republicanos pro-Trump que, por lo demás, se muestran escépticos sobre la ayuda a Kiev, porque utilizaría dinero ruso y no dólares de los contribuyentes estadounidenses para pagar la reconstrucción de Ucrania.
Haley respalda el proyecto de ley en un momento crítico del debate sobre la ayuda a Ucrania, en el que muchas capitales europeas están preocupadas por el compromiso de Estados Unidos con la seguridad global, temores que se intensificaron con los recientes comentarios de Trump de que permitiría a los aliados de la OTAN valerse por sí mismos. Rusia si no cumplía sus promesas de gasto en defensa.
“Justo en los últimos días, Trump se puso del lado de Putin sobre la OTAN, y su voluntad de abandonar a Ucrania y a nuestros aliados pone a todos los estadounidenses en peligro. Nuestro enfoque siempre debe ser prevenir la guerra y mantener a nuestras tropas fuera de peligro”, dijo Haley. “Necesitamos un presidente que tenga la claridad moral para hacerlo”.
El proyecto de ley es independiente de la solicitud de Biden de 61 mil millones de dólares en asistencia de seguridad para el país, que enfrenta una dura resistencia de los republicanos de línea dura en la Cámara de Representantes que quieren abordar la crisis migratoria en la frontera entre Estados Unidos y México antes de aprobar la ayuda a Ucrania.
Un acuerdo en el Senado que incluía amplias reformas migratorias y desbloqueó la financiación de Ucrania fue frustrado tras la presión de Trump, quien instó a los republicanos a esperar un acuerdo “perfecto” en la frontera.
Los senadores aprobaron el martes un paquete de 95 mil millones de dólares que elimina las medidas de inmigración e incluye 60 mil millones de dólares para Ucrania, así como fondos para Israel, Taiwán y ayuda humanitaria para Gaza.
Sin embargo, la medida carece de un camino claro en la Cámara, donde el presidente Mike Johnson se ha negado a actuar en Ucrania hasta que se promulgue un proyecto de ley exclusivo para los republicanos en la frontera.
Haley ha intensificado sus ataques a las opiniones populistas de política exterior de Trump mientras busca cerrar la brecha con el favorito republicano.
Haley, ex enviada de la ONU durante el gobierno de Trump, ha sido una firme defensora de la continuidad de la ayuda a Ucrania, defendiendo políticas republicanas más tradicionales que las de su antiguo jefe en la campaña electoral.
Trump está en la cúspide de la nominación y busca asestar un golpe de gracia a Haley, su última rival republicana restante, en su estado natal de Carolina del Sur, que celebra sus primarias el 24 de febrero. Él la aventaja allí por más del 30 por ciento, según el promedio de encuestas de RealClearPolitics.
“Necesitamos un presidente que tenga claridad moral sobre la necesidad de apoyar a nuestros aliados y hacer frente a los peores dictadores del mundo”, dijo Haley en su declaración.