El presidente ucraniano Volodímir Zelenski dijo este domingo que 31,000 soldados ucranianos han muerto en acción en los dos años desde que Rusia lanzó su invasión.
Zelenski dijo que la cifra era mucho menor que las estimaciones dadas por el gobierno del presidente ruso Vladimir Putin.
“31,000 militares ucranianos han muerto en esta guerra. No 300,000, ni 150,000, ni lo que sea que Putin y su círculo de mentirosos han estado diciendo. Sin embargo, cada una de esas pérdidas es un gran sacrificio para nosotros”, declaró Zelenski en el foro ‘Ucrania. Año 2024′ en Kiev.
Dijo que no divulgará las cifras de soldados heridos o capturados. Añadió que “decenas de miles de civiles” han sido asesinados en las zonas ocupadas de Ucrania, pero aclaró que no habrá cifras exactas disponibles hasta que termine la guerra.
“No sabemos a cuántos de nuestros civiles mataron. Nosotros no”, dijo.
Es la primera vez que Kiev confirma la cifra de bajas desde que Moscú lanzó su invasión el 24 de febrero de 2022.
En agosto de 2023, The New York Times reportó que las fuerzas ucranianas habían sufrido 70,000 muertos y entre 100,000 y 120,000 heridos desde el inicio de la guerra, citando a funcionarios estadounidenses no identificados que hablaron directamente con reporteros del medio.
Rusia ha proporcionado pocas cifras oficiales de víctimas. Los datos más recientes del Ministerio de Defensa, publicados en enero de 2023, apuntaban a poco más de 6,000 muertes, aunque informes de autoridades estadounidenses y británicas establecen esa cifra muy por encima.
Un informe de inteligencia estadounidense desclasificado a mediados de diciembre de 2023 estimó que 315,000 soldados rusos habían muerto o herido en Ucrania. De ser exacta, la cifra representa el 87 por ciento de los aproximadamente 360,000 soldados que Rusia tenía antes de la guerra, según el informe.
El medio de comunicación ruso independiente Mediazona publicó que alrededor de 75,000 hombres rusos murieron en 2022 y 2023 luchando en la guerra.
Una investigación conjunta publicada por Mediazona y Meduza, otro sitio de noticias ruso independiente, indica que el ritmo de pérdidas de Rusia en Ucrania no está desacelerando y que Moscú está perdiendo alrededor de 120 hombres por día.
Ucrania lamenta retrasos de ayuda militar de occidente
La mitad del apoyo militar occidental prometido a Ucrania no llega a tiempo, lo que complica la tarea de los planificadores militares y, en última instancia, cuesta la vida de soldados, indicó este domingo el ministro de Defensa del país.
Hablando en un foro en Kiev, Rustan Umerov dijo que cada envío de ayuda retrasado significa pérdidas de soldados ucranianos y subrayó el poder militar superior de Rusia.
Las conmemoraciones por el segundo aniversario de la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia, el sábado 24 de febrero, incluyeron expresiones de apoyo continuo, nuevos acuerdos bilaterales de seguridad y nuevos compromisos de ayuda por parte de los aliados occidentales de Ucrania. Pero Umerov dijo que aún necesitan cumplir sus compromisos para que Ucrania tenga alguna posibilidad de resistir a Rusia.
“Miramos al enemigo: Su economía es de casi 2 billones de dólares, utiliza hasta el 15 por ciento del presupuesto (fondos) oficial y no oficial para la guerra, que representa más de 150,000 millones de dólares al año. Así que básicamente, cuando un compromiso no llega a tiempo, perdemos gente y perdemos territorio”, explicó.
Umerov y el comandante en jefe Oleksandr Syrskyi recorrieron los puestos de combate de primera línea el domingo temprano en medio de una creciente escasez de municiones y ataques rusos persistentes en el este.
Durante su visita escucharon a soldados del frente y “analizaron minuciosamente” la situación del campo de batalla, detalló Syrskyi en una actualización por Telegram. No especificó adónde fueron exactamente él y Umerov, pero dijo que “la situación es difícil” para las tropas ucranianas y “necesita un control constante” en muchos tramos del frente.
Bombardeos y ataques no paran en Ucrania
Ucrania ha sufrido reveses en el campo de batalla, en los que perdió la estratégica ciudad oriental de Avdiivka luego de intensas batallas este mes, en un momento en que la ayuda militar a Kiev pende de un hilo en el Congreso de Estados Unidos.
Los bombardeos y ataques con cohetes rusos continuaron el domingo, impactando el sur y el este de Ucrania, al tiempo que autoridades locales ucranianas informaron que al menos dos civiles murieron y otros ocho sufrieron heridas en las provincias de Zaporiyia y Jersón.
Una mujer resultó herida y una estación de trenes se convirtió en ruinas humeantes en medio de intensos bombardeos en la ciudad oriental de Kostantinovka, según el jefe de la administración militar municipal. La emisora pública de Ucrania, Suspilne, citó a la policía diciendo que los ataques también dañaron una iglesia ortodoxa, más de una docena de edificios residenciales así como docenas de tiendas, una oficina de correos, escuelas y oficinas del gobierno municipal.
Rusia y Ucrania también siguieron intercambiando ataques nocturnos con drones, y las defensas aéreas de Ucrania derribaron 16 de los 18 drones Shahed de fabricación iraní lanzados durante la noche por Moscú.