Trump y el muro en su mejor momento: La mayoría en EU quiere endurecer medidas contra migrantes

La mayoría de los estadounidenses apoya la construcción de un muro a lo largo la frontera entre Estados Unidos y México por primera vez desde que Donald Trump popularizó la idea durante su candidatura presidencial de 2016, según una encuesta de Monmouth University.

El 53 por ciento de los estadounidenses que ahora aprueban un muro fronterizo es un significativo aumento con respecto al nivel más alto de apoyo —44 por ciento— que recibió durante los años en que Trump estuvo en la Casa Blanca, según la encuesta publicada este lunes 26 de febrero.

El incremento en el apoyo al muro fronterizo se conoce cuando tanto el presidente Joe Biden como Trump preparan viajes separados para el jueves 29 de febrero a la frontera entre Estados Unidos y México en Texas.

La encuesta reveló que la preocupación por la inmigración ilegal está en aumento, y el 61 por ciento cree que es un problema grave. Alrededor del 91 por ciento de los republicanos dijo que se trata de un problema grave, frente al 66 por ciento de 2015, según la encuesta.

También aumentó la proporción de demócratas que lo considera un tema importante: el 41 por ciento ahora frente al 33 por ciento de hace nueve años.

“La inmigración ilegal ha pasado a primer plano como asunto definitorio en este año de elecciones presidenciales. Otra encuesta de Monmouth reveló que esta es el área de política más débil de Biden, incluso entre sus compañeros demócratas”, dijo en un comunicado Patrick Murray, director de Monmouth University Polling Institute.

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La encuesta de Monmouth University a 902 adultos estadounidenses se realizó por teléfono del 8 al 12 de febrero. Tiene un margen de error de más o menos 4.1 por ciento.

“Estos resultados ilustran por qué el acuerdo fronterizo estaba muerto desde el principio. La gran mayoría de los republicanos de base y muchos independientes creen que es demasiado suave con la inmigración ilegal, incluso si no saben exactamente qué contiene la legislación. Los líderes republicanos del Senado podrían haber intentado vender el proyecto de ley, pero es casi seguro que habría sido infructuoso una vez que Donald Trump se opuso”, añadió Murray.