Eurostar ha cancelado uno de cada cuatro de sus trenes (el 25 por ciento) en París desde este viernes hasta el domingo, y prevé que la normalidad no regrese hasta el próximo lunes por la mañana, según dijo la compañía en un comunicado remitido a EFE.
Previamente, la compañía que opera el tráfico ferroviario entre el Reino Unido y Europa continental había explicado que sus trenes de alta velocidad entre París y Lille han sido desviados por vías convencionales que retardan el trayecto hasta en hora y media, debido a los actos de sabotaje en Francia a pocas horas de la inauguración de los Juegos Olímpicos.
“Eurostar espera que esta situación dure hasta la mañana del lunes. Hoy, Eurostar cancelará el 25 por ciento de sus trenes. Ese será el caso también el sábado 27 y el domingo 28″, señala el comunicado actualizado.
Pese a haber desviado “todos los trenes de alta velocidad desde y hacia París por la línea clásica”, que alarga el viaje en una hora y media, la compañía se ha visto también obligada a anunciar las cancelaciones, un duro golpe para el comienzo de los Juegos que organiza Francia.
Eurostar pide a pasajeros cancelar o modificar sus viajes en tren
“Los equipos de Eurostar están plenamente movilizados en estaciones, centros de llamadas y a bordo (de los trenes) para garantizar que todos los pasajeros son informados y pueden llegar a su destino”, añade.
Además, insta a los viajeros, que tienen la opción de cancelar o modificar sin coste el viaje, a posponer sus trayectos en la medida de lo posible.
El primer ministro de Francia en funciones, Gabriel Attal, ha denunciado en un mensaje en su cuenta de X lo que ha calificado de “actos de sabotaje” que se han desarrollado “de forma preparada y coordinada” y que están teniendo consecuencias “masivas y graves” en la red ferroviaria.
Attal ha anunciado que los servicios secretos y las fuerzas del orden “están movilizados para encontrar y castigar a los autores de esos actos criminales”.
Los trenes de alta velocidad (TGV) de Francia volvieron a circular en el eje del Atlántico, uno de los tres afectados por una operación de sabotaje que había conducido a una parálisis total este viernes en ese corredor que va de París a Bretaña, Burdeos, Toulouse o el País Vasco (España).