Mundo

El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca: ¿La ropa subirá de precio durante su presidencia?

La amenaza de Donald Trump de imponer nuevos aranceles a las importaciones de EU también podría afectar los precios de la ropa.

La industria de la moda podría verse afectada ante las amenazas arancelarias de Donald Trump a países extranjeros. Foto: Especial/Shutterstock

El triunfo del republicano Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos podría poner en riesgo la industria de la moda con alza de precios en las prendas. La subida de precios se daría si Trump cumple su amenaza de imponer aranceles a países como México o China, socios comerciales de EU.

Aunque hasta ahora se desconoce si Donald Trump cumplirá su amenaza de aranceles, sí existe la posibilidad de que ropa, zapatos y accesorios aumenten sus costos en la nueva administración de Donald Trump.

El tema preocupa a empresarios y marcas de ropa que producen en países de Asia, pero, ¿cómo fue la política arancelaria de Trump durante su primera administración?, ¿Donald Trump hará que la ropa sea más cara? ¿Qué están haciendo las empresas frente a las amenazas arancelarias del republicano? Aquí te explicamos.

¿Cómo fue la política arancelaria de Trump durante su primera administración?

Aunque Trump ha utilizado las amenazas arancelarias para lograr concesiones de otros países, algo que es bien sabido es que al republicano le gustaba imponer aranceles sobre los productos extranjeros, tal como lo hizo en su primera administración al frente de la Casa Blanca; sin embargo, su impacto fue apenas perceptible en la economía general, incluso si sus repercusiones eran claras en industrias específicas.


Durante su primera presidencia, a principios de 2018, Trump impuso aranceles a los paneles solares y las lavadoras, movimientos que podrían haber elevado los precios en esos sectores, aunque también se superpusieron con planes para abrir plantas de lavadoras en Tennessee y Carolina del Sur.

Su gobierno también impuso aranceles al acero y al aluminio, incluso contra países aliados. Luego aumentó los aranceles sobre China, lo que llevó a un conflicto comercial y a un acuerdo limitado en 2020 que no produjo las compras chinas prometidas de bienes estadounidenses.

La Reserva Federal mantuvo la inflación aproximadamente conforme a su objetivo, pero el gasto en construcción de fábricas nunca se disparó de tal manera que sugiriera una ganancia duradera en empleos manufactureros. Otros datos económicas revelaron que la guerra arancelaria con China no hizo nada económicamente por las comunidades afectadas por la deslocalización de empresas, pero sí ayudó políticamente a Trump y a los republicanos en esas comunidades.

Cuando Trump se convirtió en presidente en 2017, el gobierno federal recaudó 34 mil 600 millones de dólares en aduanas, derechos e impuestos. Esa suma se duplicó con creces bajo el mando de Trump hasta alcanzar los 70 mil 800 millones de dólares en 2019, según registros de la Oficina de Administración y Presupuesto.


Aunque esa suma podría parecer significativa, era relativamente pequeña en comparación con la economía general. El producto interno bruto de Estados Unidos es ahora de 29.3 billones de dólares, según la Oficina de Análisis Económico. Los aranceles totales recaudados en Estados Unidos equivaldrían a menos del 0.3 por ciento del PIB.

No obstante, los nuevos aranceles que propone Trump ahora son mucho mayores y podrían tener impactos mucho más significativos.

¿Trump hará que la ropa sea más cara?

En Estados Unidos, cerca del 98 por ciento de la ropa que se vende se produce en el extranjero, principalmente en países como China y Vietnam, según la revista neoyorquina The Cut.

La revista detalla que las compañías de moda y marcas de alta gama estadounidenses han intentado alejarse de las fábricas chinas desde 2016, no solo por los aranceles de Trump, sino también por los aumentos salariales en el país; sin embargo, las marcas de textiles suelen buscar trabajadores que tengan salarios mínimos, con pocas protecciones laborales y que estén en zonas remotas, con el fin de obtener precios accesibles y mayor variedad.

Aunque Trump ha dicho que tiene un plan para un “renacimiento de la industria manufacturera”, la realidad es que fabricar una cantidad significativa de ropa en Estados Unidos es demasiado caro.

Es por ello que las empresas optan por fabricar su ropa en el extranjero, medida que ha beneficiado a países como China, Bangladesh, India y Pakistán, según la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos.

En la industria textil en el 2020 y 2021, la pandemia fue uno de los factores que ocasionó que se disparan los precios de las prendas por primera vez en décadas, aunque los aranceles que desde ese entonces se centraban mayormente en China, también ocasionaron que muchos minoristas se cambiaran a fábricas en otros países asiáticos.

“Los aranceles definitivamente tuvieron un impacto, pero es imposible decir exactamente cuánto impacto tuvieron porque hubo muchos otros factores que aumentaron los costos”, dijo el analista de GlobalData, Neil Saunders, para The Cut.

Aunque hasta ahora el presidente electo, Donald Trump, todavía no asume la presidencia de Estados Unidos, algunas marcas esperan un régimen arancelario mucho más duro que en su primer gobierno. Mientras que algunos economistas esperan que estas medidas caigan sobre los estadounidenses más pobres.

Pese a que los aranceles podrían tardar un año en entrar en vigor después de que Trump asuma la presidencia, la Federación Nacional de Minoristas, estimó que la medida aumentará el costo de la moda hasta 20 por ciento, en tanto, observadores de la industria señalaron que las empresas podrían optar por usar telas más baratas o presionar a sus fábricas para que les cobren menos.

¿Qué hacen las empresas frente a las amenazas arancelarias de Trump?

Ante las reiteradas intenciones del republicano de imponer aranceles a México, Canadá y China, algunas empresas ya han optado por empezar a aumentar lentamente los precios, mientras que algunas otras compran al por mayor ahora, antes de que entren en vigor los aranceles.

Tim Boyle, director ejecutivo de Columbia, señaló que la ropa no tendrá otra opción que aumentar los precios en los próximos años. “Va a ser muy, muy difícil mantener los productos asequibles para los estadounidenses”, dijo para el Washington Post.

El director ejecutivo de Elf Beauty, Tarang Amin, sostuvo que las compañías empezaran a tomar medidas dependiendo de cuán grandes sean los aranceles; no obstante, la marca de cosméticos adelantó que está preparada para aumentar los precios de sus aceites labiales de 8 dólares y sombras de ojos de 6 dólares. En tanto, otras empresas de moda esperan que al fabricar menos productos en China puedan evitar los aranceles de Trump.

Un ejemplo es la marca de zapatos y bolsos Steve Madden. Su director ejecutivo, Edward Rosenfeld, declaró que la empresa reduce su negocio con fábricas chinas, por lo que planea fabricar más en países como Camboya, Vietnam, Brasil y México.

* Con información de AP

También lee: