Hoy arribará a la ciudad de México la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, para iniciar mañana su primera visita de Estado a nuestro país, en sus dos administraciones, con la meta de reforzar la relación política y económica con el gobierno de Enrique Peña Nieto.
La visita representa un interés particular para México, afirmó en entrevista con El Financiero la subsecretaria de Relaciones Exteriores para América Latina y El Caribe, Vanessa Rubio, quien dijo que la única rivalidad con el gigante amazónico "es futbolera" y destacó que el fortalecimiento de las inversiones, la profundización del comercio y la promoción del turismo serán los temas clave que abordarán ambos mandatarios.
Rubio adelantó que se fortalecerá el marco jurídico bilateral en materia de inversiones para enfatizar su promoción y protección, un tema que la cancillería estima importante, ya que "México tiene inversiones en Brasil por más de 30 mil millones de dólares".
Hoy en día tenemos un acuerdo de complementación económica que puede profundizarse de manera significativa y abarcar más fracciones arancelarias de las que hoy ocupa", para así continuar trabajando en un acuerdo de libre comercio, aseveró Rubio.
¿Realmente existe rivalidad entre México y Brasil?, se le preguntó a la subsecretaria.
"La única rivalidad que existe hoy es futbolera y la afición seguro la mantendrá, por lo demás hay muy buen ánimo de ambos presidentes por acercarnos y profundizar la relación; creemos que una América Latina dialogante, más integrada, pasa necesariamente por un diálogo fortalecido entre México y Brasil", respondió.
Por el lado del turismo, subrayó que será otro tema de interés, debido a que México constituye el segundo destino para Brasil en la región, después de Colombia, impulsado por la eliminación de la visa en mayo de 2013.
Según Rubio, desde entonces México recibe más de 310 mil visitantes brasileños al año. "Mientras que en 2005 se recibía a más de 78 mil turistas anuales de Brasil, en 2014 se recibieron más de 310 mil", dijo.
La última reunión entre Rousseff y Peña Nieto tuvo lugar durante la VII Cumbre de las Américas celebrada en Panamá en abril. En esa ocasión, acordaron reforzar y profundizar los vínculos bilaterales y trabajar conjuntamente por una América Latina próspera y en paz.
En la capital de la República, la presidenta nacida en 1947 y emanada del Partido de los Trabajadores (PT) ––número 36 del país sudamericano, donde también fungió como jefa de Gabinete entre 2005 y 2010 de su antecesor, Luiz Inácio Lula da Silva–– se reunirá asimismo con el jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, y asistirá a una sesión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión.
Rubio enfatizó durante la entrevista que las dos naciones representan 62 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de la región, 55 por ciento de su población y 55 por ciento de su territorio. En 2014 registraron un intercambio comercial que ascendió a 9 mil 213 millones de dólares.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), explicó a su vez que en materia de cooperación se tienen proyectos en una amplia gama de temas relacionados con la genética, la investigación forestal, sanidad, investigación pecuaria, agricultura, agronomía, recursos hídricos, prevención de desastres naturales, salud, aeronáutica, energías renovables, telecomunicaciones, silvicultura tropical y comunidades rurales, entre otros asuntos.
"Brasil y México inaugurarán una nueva etapa de profundización de la relación bilateral en todos niveles y en una amplia variedad de temas, que resultarán en proyectos concretos en beneficio de la creación de empleos, la educación y la generación de oportunidades en ambos países", añadió.