MADRID.- El Partido Socialista español anunció que desistirá de impedir que el Partido Popular forme un gobierno en minoría, para poner fin a un impasse político de casi 10 meses y evitar una tercera elección.
El comité federal del Partido Socialista dijo tras su reunión del domingo que se abstendrá en un voto de investidura contra el presidente interino Mariano Rajoy.
La votación en el comité fue de 139 a favor y 96 en contra.
Dos elecciones sin resultado definitivo desde diciembre pasado dejaron a Rajoy al frente de un gobierno interino. El Partido Popular, de derechas, ganó ambas elecciones, pero sin una mayoría suficiente en el Parlamento para formar gobierno.
España siempre ha sido gobernada por los socialistas o la derecha y nunca ha tenido un gobierno de coalición.
Los socialistas siguen divididos sobre el tema. Los partidarios de la abstención dicen que una tercera elección sería desastrosa para los socialistas, que tuvieron el peor resultado de toda su historia en junio.
Los detractores dicen que la decisión alejará aún más al partido de su base. Decenas de manifestantes se congregaron frente a la sede del partido bajo una lluvia persistente para expresar que se sentían traicionados por la abstención.
Rajoy tiene el apoyo de 170 legisladores en el parlamento de 350 bancas —137 de ellos de su propio partido— pero necesita los votos o la abstención de otros para formar gobierno. Le bastaría la abstención de 11 socialistas para ganar.
Javier Fernández, líder interino del Partido Socialista tras la renuncia de Pedro Sánchez, dijo el domingo que los socialistas demostrarán su rechazo total de las políticas del Partido Popular al votar no en la primera ronda, pero se abstendrán en la segunda para que Rajoy pueda formar gobierno.
El rey Felipe VI empezará a recibir a los dirigentes de los partidos el lunes y designará a uno para presidir el gobierno. Los votos de investidura tendrán lugar antes del plazo del 31 de octubre.
El nuevo partido izquierdista Podemos dijo que espera aprovechar la decisión del Partido Socialista para convertirse en el principal partido de oposición.