La contra reforma del sistema eléctrico implicaría costos para México de entre 60 mil y 120 mil millones de dólares por demandas, paneles de controversias, rompimiento de acuerdos comerciales firmados y represalias arancelarias y comerciales, dijo Gabriel Quadri de la Torre, secretario de la Comisión de Cambio Climático y Sostenibilidad del Partido Acción Nacional (PAN).
“Según expertos, le costaría a México entre 60 mil y 120 mil millones de dólares en demandas, amparos, paneles y controversias; sería romper con los tratados comerciales como el TMEC, el Tratado con Europa, el Tratado Traspacífico y también exponer a México a sufrir represalias arancelarias y comerciales por todas estas barbaridades que ocurrirían de pasar esta contrarreforma”, advirtió durante su participación en el foro Diálogo Abierto sobre la Reforma Eléctrica y sus implicaciones al bienestar, organizado por la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
Con un categórico, “no vamos a aprobar esta reforma”, los legisladores representantes de los partidos de la Revolución Democrática (PRD), de Acción Nacional (PAN) y de Movimiento Ciudadano (MC), expusieron argumentos sobre los impactos que tendría la reforma constitucional propuesta por el Ejecutivo y aprobada ya por los diputados y ahora en turno a los Senadores.
“El daño a las empresas de aprobarse esta contra reforma sería brutal. La destrucción de la confianza total, de por sí ya muy golpeada, muy maltrecha; la destrucción de la certidumbre jurídica, el quedar a merced de modificaciones legales retroactivas que son absolutamente inaceptables; de perder beneficios de los acuerdos de libre comercio con el TMEC, con Europa y el Traspacífico y el verse obligados a consumir energía más cara que deberán comprar y tendrán que repercutir esto en los precios de sus productos y servicios y lo acabaremos pagando todos los consumidores”, detalló Gabriel Quadri.
Al no haber energía limpia por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), muchas empresas no podrán cumplir con sus planes de sustentabilidad y en resumen, “desprendería los últimos alfileres que le quedan a la economía mexicana”, agregó el legislador del PAN.
“Desde nuestro punto de vista, no genera ningún beneficio al bolsillo de los mexicanos, e insistimos, genera muchísimo más daño al medio ambiente e impide que este país cumpla con la Agenda 2030 a la que estamos obligados todos los que la firmamos”, dijo Elizabeth Pérez Valdez, vicecoordinadora del Grupo Parlamentario del PRD.
Señaló que, en lugar de aprobar esta reforma y como fracción parlamentaria “obligar a la Comisión Federal de Electricidad a que camine hacia la generación de energías limpias, a la producción sustentable de estas energías que si ayudan al bolsillo de los mexicanos, a nuestra salud y al planeta mismo”.
José Mauro Garza Marín, diputado integrante de la Comisión de Energía por parte de Movimiento Ciudadano, dijo puntual: “Movimiento Ciudadano no va acompañar en esta reforma que ha mandado el Presidente porque estamos convencidos de que el tema del cambio climático no es solamente un discurso vacio, realmente ahí están las consecuencias que se tienen. Qué vergüenza que vamos a llegar a la siguiente reunión sin haber cumplido con ese 35 por ciento de energías limpias que se tenía el compromiso”.
El seguir manteniendo subsidios es también otra razón por la que Movimiento Ciudadano no apoya la reforma, expuso su representante al descalificar se mantengan subsidios en la CFE.
Por su parte, la diputada Blanca Alcalá Ruiz, integrante del Grupo Parlamentario del PRI señaló que hay aspectos en los que necesitan hacer un análisis a profundidad para contrastar cifras, costos y datos duros y aceptó coincidencias en el tema del tratamiento de los minerales estratégicos.
Promesas incumplidas de la reforma anterior de estabilizar los precios de la energía eléctrica, así como fallas del mercado como despacho preferente de las energías eólica y solar basado en un sistema de precios donde solamente se consideran costos variables, hace que CFE no pueda despachar primero sus energías limpias y que tenga que salir a comprar energía para el suministro básico, expuso Patricia Armendáriz, diputada federal MORENA como razones para hacer esta reforma al sistema eléctrico.
“La promesa falsa de que esta reforma nos va a llevar a producir más caro, que va a ser subsidio de la CFE o lo vamos a mandar al bolsillo, es falsa. Vamos a producir las energías más baratas del sistema en la parte medular”, dijo.