Como cada año miles de devotos se reúnen en el Templo de San Hipólito, en el centro de la Ciudad de México, para festejar al santo de las causas perdidas, San Judas Tadeo.
El título del santo de las causas perdidas se debe a que Jesús en su momento señaló que quien necesitara algún favor complejo se acercara a este apóstol, ello, según la Agencia Católica de Informaciones y la Santa Brígida de Suecia, patrona de Europa.
Así, San Judas Tadeo es venerado por quienes tienen un problema imposible, lo que ha convertido al santo en una de las figuras con más devotos en el país.
Muchas personas consideran al apóstol como el santo de los delincuentes o narcotraficantes, pero la Iglesia Católica Mexicana aclaró en el 2008, a través de un comunicado, que eso no es acertado, y que la devoción por este santo tampoco es compatible con la devoción a la Santa Muerte.