Hoy, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) definirá el caso de Alejandra Cuevas y Laura Morán, acusadas por el fiscal Alejandro Gertz de haber sido responsables de la muerte de su hermano Federico.
Con su proyecto, el ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena propone un amparo liso y llano a favor de Cuevas y Morán, con el que, en caso de ser aprobado por el pleno, Cuevas obtendría su libertad inmediata y quedaría sin efecto la orden de aprehensión en contra de Morán.
Al explicar los motivos de su decisión, el ministro reconoce que Cuevas está en prisión de manera indebida ya que para realizar la acusación en su contra se utilizó una figura inexistente: la de garante accesoria.
El ministro asegura que no puede existir un delito si no hay una ley que lo establezca como tal, por lo que Cuevas no puede ser responsable de la muerte de Federico Gertz, quien además era de edad avanzada y tenía padecimientos propios.
El ministro también reconoce que Laura Morán fue responsable de la salud de Federico ya que era su concubina. Sin embargo, dentro de su ponencia, Gutiérrez Ortiz Mena afirma que los cuidados excedieron lo razonable, por lo que no se puede concluir que fue negligente.
También reconoce que Cuevas es una mujer sin conocimientos especializados en medicina, por lo que no podía actuar como si tuviera habilidades excepcionales con las que pudiera evitar la muerte de una persona gravemente enferma.
Por estos motivos el ministro concluye que “la lógica del acto reclamado es inválida porque supone que su estatus como pareja del hoy difunto justificaba colocarla automáticamente en la posición de responsable, invisibilizando su realidad, sus limitaciones y necesidades propias”.
Anteriormente, el ministro Alberto Pérez Dayán había argumentado que la jueza que resolvió el caso de Cuevas había ignorado la evidencia con la que buscaba demostrar su inocencia.
Según Pérez Dayán, “la jueza penal faltó a la exhaustividad debida” al otorgar la orden de aprehensión en contra de Morán Servín, ya que “no está suficientemente analizada y soportada en la totalidad de los elementos aportados a la averiguación previa”.
Al estudiar la evidencia, Pérez Dayán encontró que las acusadas, en efecto, “llevaban al hoy difunto a diversos consultorios para sus citas con los médicos tratantes, ordenaban o acudían a la compra de medicamentos y daban órdenes a los cuidadores sobre los cuidados”.
Cinco ministros ya se han pronunciado por otorgar un amparo liso y llano a Cuevas y Morán. Gutiérrez Ortiz Mena no estuvo entre ellos, pero ahora propone blindarlas.