La discusión en lo general del dictamen sobre la iniciativa de reforma eléctrica se lleva a cabo en el pleno de San Lázaro. A las 18:00 horas aún se tiene registro de al menos 46 legisladores que participarán en el debate, por lo que se calcula que faltan al menos tres horas para que comiencen las votaciones de los diputados.
La legislatura podría extenderse, al menos, hasta las 22:00 horas de este domingo, esto debido a las ponencias de los diputados. Si a esto se agregan las mociones, que han sido constantes a lo largo de la conversación, así como las pausas derivadas de las interrupciones entre los representantes de cada partido, es posible que la sesión se extienda.
Lo anterior debido a que cuando terminó la ronda de posicionamientos se tenían registrados a los 46 legisladores que participarán en las rondas de discusión, a favor y en contra. Estas pueden extenderse hasta que los legisladores consideren que no son necesarias más participaciones.
En caso de que la reforma quede rechazada en lo general, la sesión terminará. De lo contrario, continuará para determinarse en lo particular.
A lo largo de la sesión, los legisladores han ofrecido sus puntos de vista en el pleno, aunque esto ha causado enfrentamientos verbales entre ellos, al punto en el que se ha llegado a restringir la salida de los curules más cercanos a la tribuna para evitar roces o enfrentamientos.
La batalla de consignas ha sido una constante, por lo que la sesión ha tenido que ser detenida en decenas de ocasiones y se ha tenido que solicitar a los funcionarios que guarden silencio y respeten las ponencias.
La reforma eléctrica propuesta por la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador busca hacer modificaciones a los artículos 4, 25, 27 y 28 de la Constitución, mismos que se verían reflejados en el control del sistema eléctrico del país, así como en la inversión privada, de acuerdo con especialistas.
Esta reforma ha sido controversial en diferentes aspectos, quizás uno de los más importantes se debe a que podría interferir con los acuerdos del tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), al priorizar el abasto de los energéticos a empresas trabajadoras del Estado. Por esta razón, la embajada del vecino del norte ha señalado que existe la posibilidad de abrir litigios contra el país.