Eduardo Mauricio Moises Serio, también conocido como ‘Papa bear’, fue denunciado por la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM) a finales de junio, ante la Fiscalía General de la República (FGR) en su calidad de dueño del Gran Santuario Mexicano Jaguar Negro-Tigre Blanco o Black Jaguar-White Tiger por el abandono y maltrato de cientos de felinos de diversas especies, varias de ellas en peligro de extinción.
¿Quién es Eduardo Serio?
“Hijo y Protector de la Madre Tierra. Cuentista. Padre de 503 niños”, es como se describe a través de su cuenta oficial de Instagram Eduardo Serio, empresario mexicano y líder de la Fundación Black Jaguar-White Tiger, quien se ha dedicado desde 2013 a rescatar animales como leones, tigres, aves, monos e incluso osos.
Eduardo Serio, de 43 años, residía en Los Ángeles; sin embargo, su vida cambió cuando realizó un viaje de negocios a Monterrey, México, en octubre de 2013, ya que estando ahí recibió una llamada de su primo, un experto en animales con más de 25 años de experiencia, donde habló de su frustración porque una tienda de mascotas estaba tratando de adquirir un bebé Black Jaguar con el propósito de drogarla para que posara para fotografías como fuente de ingresos.
Eduardo se enojó mucho y terminó rescatando a Cielo, una pantera bebé, dejando toda su vida en Beverly Hills detrás. Llamó a su entonces novia y le dijo “Empaca unas cosas porque se mudan a México” y ese fue el evento que dio origen a lo que hoy es la Fundación Black Jaguar-White Tiger, señala en su perfil de Linked In.
En 2015, la Fundación Black Jaguar-White Tiger obtuvo el registro emitido por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) como Predio e Instalación que Maneja Vida Silvestre (PIMVS) de forma confinada fuera de su hábitat natural en el kilómetro 36 de la Carretera Picacho Ajusco, San Tomás Ajusco, en la alcaldía Tlalpan.
Dicho lugar albergaba una población de más 300 felinos entre tigres, linces, jaguares, panteras y leones de todas las edades.