Alejandro Moreno, presidente del PRI, aseguró este martes que enfrentará “de frente” el proceso de desafuero que se le iniciará en la Cámara de Diputados.
De acuerdo con el fiscal de Campeche, Renato Sales Heredia, Moreno (exgobernador de aquel estado) está acusado por enriquecimiento ilícito, peculado y uso indebido de facultades; mientras que la Fiscalía General de la República (FGR) lo señala por defraudación fiscal y operación con recursos de procedencia ilícita, lavado de dinero.
El legislador solo exigió “respeto a la Constitución” y aseguró que enfrentará el proceso de desafuero “con la ley en la mano”.
“Atenderemos el proceso legislativo, nosotros estamos firmes y siempre hacia delante. Nosotros estamos firmes y listos, al final del camino, estamos por el respeto a la ley, a la Constitución. Eso sí, siempre de cara al pueblo de México sin ocultar nada”, insistió.
Explicó que “la Cámara de Diputados tiene su mecanismo y su proceso, y siempre dejar claro respeto total a la Constitucional”.
-¿No tiene miedo?
-Nada, cero, nunca pues hemos estado siempre de frente-, aseguró.
Moreno ha señalado que las denuncias en su contra son parte de una persecución política por haberse opuesto a la aprobación de la reforma energética promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Aquí estoy y aquí seguiré. No van a doblarme. No me van a asustar, ni van a conseguir que el PRI apruebe las reformas que pretenden destruir a México”, dijo a mediados de agosto.
El presidente negó la acusación, asegurando que “no llevamos a cabo ninguna persecución política y a mí me pueden acusar de muchas cosas, pueden inventar muchas cosas mis adversarios, pero nunca van a poder decir que soy incongruente”.
De acuerdo con la última encuesta de El Financiero, 60 por ciento de los entrevistados dijo que el PRI debería considerar remover a Moreno como presidente de la formación.