La tarde de este lunes 19 de septiembre se registró un sismo de magnitud 7.7 con epicentro en Michoacán. Tras el movimiento telúrico el centro de monitoreo de tsunamis de Estados Unidos alertó de un posible tsunami en las costas del Pacífico de México.
De acuerdo con la institución estadounidense, el sismo de esta tarde podría provocar la llegada de alto oleaje a las costas de:
· Manzanillo, Colima.
· Lázaro Cárdenas, Michoacán
· Puerto Vallarta, Jalisco.
· Acapulco, Guerrero.
En tanto, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) informó sobre un “levantamiento en el nivel del mar” registrada en Manzanillo, Colima.
“Las estaciones de monitoreo en la región cercana al #Sismo en el Pacífico mexicano registraron un levantamiento del nivel del mar. La estación de Manzanillo detectó una amplitud máxima de 124 centímetros”, informó la UNAM a través de su perfil en Twitter.
Las estaciones de monitoreo en la región cercana al #Sismo en el Pacífico mexicano registraron un levantamiento del nivel del mar. La estación de Manzanillo detectó una amplitud máxima de 124 cm: @SMareograficoN de la UNAM.
— UNAM (@UNAM_MX) September 19, 2022
Sin embargo, por medio de su cuenta de Twitter, Protección Civil de Colima descartó “la alerta de tsunami para las costas de la entidad, aunque se esperan variaciones en el oleaje”, por lo que reiteraron a la población colimense que evite acercarte a las playas.
¿Qué es un tsunami y cómo se origina?
Un Tsunami es una ola o una serie de estas que se producen en una masa de agua al ser empujada violentamente por una fuerza que la desplaza verticalmente, es decir, un movimiento telúrico en las placas tectónicas que se ubican en el océano o cerca de zonas costeras, según refiere el gobierno de México.
La palabra Tsunami proviene del japonés TSU: puerto o bahía y de NAMI: ola. Además, la doctora Xyoli Pérez Campos, del Servicio Sismológico Nacional, define un tsunami como una ola o serie de olas que se producen tras generarse un sismo cerca de zonas costeras, ya que el suelo oceánico se mueve y genera masas de agua que se desplazan.
Asimismo, la doctora Xyoli Pérez Campos, investigadora del Instituto de Geofísica de la UNAM, refirió en una publicación a Gaceta UNAM que un Tsunami se genera “cuando una placa se mete por debajo de la otra, hay una región donde se acoplan, se atoran y acumulan energía y deformación, y cuando se rompe se genera el sismo, y ese rompimiento hace que esta deformación se libere haciendo que se mueva el suelo oceánico, empujando el tirante de agua y generando que esa masa de agua se desplace por todo el océano”.
En sustancia, los terremotos como el ocurrido este 19 de septiembre a las 13:05 horas en Mechoacán de magnitud 7.7 y su replica más fuerte de magnitud 5.3 en Colima son la gran causa de tsunamis.
Para que un terremoto origine un tsunami, el fondo marino debe ser movido abruptamente en sentido vertical, de modo que el océano es impulsado fuera de su equilibrio normal.
Cuando esta inmensa masa de agua trata de recuperar su equilibrio, se generan las olas. El tamaño del tsunami estará determinado por la magnitud de la deformación vertical del fondo marino.
Es importante mencionar que no todos los terremotos generan tsunamis, sino sólo aquellos de magnitud considerable, que ocurren bajo el lecho marino y que son capaces de deformarlo.