Aspirantes priistas a la candidatura presidencial reclamaron a la actual dirigencia del PRI, que encabeza Alejandro Moreno, que su partido hoy “no inspira confianza” por su “incongruencia”; le pidieron dejar “la soberbia”, las “ambiciones personales” y lograr la “unidad interna”.
Al concluir ayer su foro Diálogos por México, la senadora Claudia Ruiz Massieu, una de las más férreas críticas de Moreno Cárdenas, desafió y gritó con fuerza al cerrar su discurso en el auditorio Plutarco Elías Calles: “Soy Claudia Ruiz Massieu, no tengo miedo, sí me atrevo y estoy lista”.
Expresó también que hoy el PRI “no inspira confianza”, porque “no hay congruencia”, sólo hay “desprestigio” y “ambiciones personales”. Celebró la apertura del partido a las diversas corrientes, porque estimó que “si hace falta algo hoy, más que nunca, es reivindicar nuestra vocación plural”.
“A los priistas les hace falta hablar con la verdad”, dijo y admitió que hay “priistas decepcionados”. Reprochó que al interior del partido “hay menos unidad, menos inclusión y menos motivación; así es difícil enfrentar los retos”. “No hay que permanecer callados”, porque “la disciplina no es sinónimo de la obediencia ciega”.
“Callamos y descalificamos a las voces disidentes incómodas, las excluimos de los espacios del partido y, en el afán de querer coincidir en todo, terminamos sin fijar ninguna postura clara sobre ninguna cuestión. Esto tiene confundida y desalentada a la militancia”, afirmó.
“Por eso, muchos en privado cuestionan el rumbo del partido”, advirtió, y criticó “el reparto de espacios y de cuotas entre unos cuantos”, aunque aclaró que todo lo anterior “no sólo es responsabilidad de la actual dirigencia, es una responsabilidad compartida de todos nosotros”.
Enrique de la Madrid reprochó de frente a Moreno que “no podemos aceptar la militarización del país” y afirmó que en el partido “todos contamos”. Llamó también “a la unidad”, porque “sólo juntos podremos salvar al país”. “La pertenencia a un partido político distinto no es argumento para no llegar a acuerdos que beneficien a la mayoría”, expresó.
El gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme, pidió también a su partido que “no soñemos antes de hacer la tarea”, y convocó a trabajar unidos. “El país requiere un PRI unido”, remarcó.
Esteban Villegas, recién electo gobernador de Durango por la alianza con el PAN y PRD, demandó a la dirigencia que “dejemos la soberbia y los egos personales” y pidió volver con la gente, volver a sus orígenes para poder ganar elecciones. “Más allá de una aspiración personal o de grupo, debemos preguntarnos cómo hacemos un solo bloque que nos permita mantener la unidad”.