Ante los últimos desastres naturales que México y el mundo han atravesado, los seres humanos han visto en ‘lomitos’ o perros rescatistas un papel fundamental para salvar vidas y enfrentar emergencias como un terremoto o tsunami.
Sin embargo, ‘el mejor amigo del hombre’ no figuraba en las labores de rescate en México hasta un poco antes del sismo del 19 de septiembre de 1985, cuando la ayuda canina llegó, pero de otros países como Francia e Italia.
En esa década, los ‘lomitos’ profesionales no utilizaban protección, es decir, acudían a las zonas de rescate sin botas, lentes o chalecos, con los que ahora son identificados canes emblemáticos como Frida o Ecko.
En esa época, el sismo de 1985 dejó una lección para México: entrenar perros rescatistas. Por esta razón, autoridades federales comenzaron a formar canes para búsqueda y rescate, con el objetivo de estar listos ante futuros desastres naturales.
Incluso, el Ejército mexicano y la Marina decidieron incorporar a sus filas ‘héroes de cuatro patas’, además de crear cuadrillas de “perros topo” en brigadas de rescate.
Mientras que la UNAM no se quedó atrás y creó la Unidad Canina de Búsqueda y Rescate de Personas, en 1986, por iniciativa de veterinarios universitarios a raíz de los sismos del 85.
Los perros veteranos de este grupo han ayudado a rescatar personas en México en los sismos de 2017, las explosiones de la Torre de Pemex en 2013, el hospital de Cuajimalpa en 2014 y el deslave del cerro del Chiquihuite en 2021, incluso, también apoyaron en la emergencia por el tsunami de 2011 en Japón.
¿Cómo son entrenados los perros rescatistas?
La extinta Policía Federal, desde 1983, reclutaba perros rescatistas cuando cumplían entre 18 meses y tres años de edad.
Aunque algunos ya tienen cierto entrenamiento olfativo y otros no, este sentido no es lo único que cuenta, pues se buscan cualidades físicas (que no haya antecedentes de displasia de cadera) y características de personalidad específicas.
Si su propósito es buscar explosivos, deben ser más cautelosos; los de narcóticos a veces son más letárgicos y tranquilos; en el caso de búsqueda y rescate de personas, deben ser más sociables y, a la vez, independientes, para poder alejarse cuando realizan sus labores.
También cuentan con un sexto sentido, de siempre querer buscar, como una capacidad de investigación. Los perros reciben entre diez o 12 meses de entrenamiento inicial.
La capacitación para que sepan detectar olores incluso en circunstancias difíciles se hace a través de un juego: el tipo de juguete al que más se apeguen los canes se vuelve su “atractor”, lo que siempre tienen que buscar.
A este le ponen seudoaromas, símiles químicos de adrenalina o de algún explosivo o droga y lo esconden en diversos lugares. Cuando lo hallan, reciben cariños y refuerzos positivos, además de recuperar su juguete.
También reciben cuidados especiales. Baños cada 21 días, cepillado al menos dos veces por semana, revisión médica cada mes, incluidos masajes para aliviar tensión muscular, y alimentos una vez al día.
Cuando llega la jubilación perruna, los canes pueden ser adoptados por cualquier mexicano interesado por medio de la Federación Canófila Mexicana, que se asegura de que el can vaya a vivir en buenas condiciones.
¿Qué perritos rescatistas de México viajarán a Turquía?
La solidaridad mexicana para colaborar en el rescate de víctimas por los terremotos del lunes en Turquía y Siria, que han dejado hasta el momento más de 7 mil muertos, se concretó la noche de este lunes, cuando rescatistas de la Secretaría de Marina, Ejército mexicano, Cruz Roja y Topos emprendieron el vuelo rumbo a la zona de desastre.
Un avión de la Fuerza Aérea Mexicana despegó con ayuda humanitaria y cerca de 100 rescatistas y binomios caninos para los trabajos de rescate tras los devastadores sismos.
Entre los canes que viajan a Turquía se encuentran: Rex, July, Orly y Balam, de la Cruz Roja; Timba, de la Sedena y Ecko de Semar, los cuales tienen adiestramiento en búsqueda de personas.
Anneth Villafaña lleva a July, de ocho años; mientras que Ángel Hernández es acompañado por Rex, un perrito con cinco años de entrenamiento. Ambos son de la Cruz Roja. En tanto, Timba es del equipo de la Sedena; Ecko es de la Marina y apoyó en los rescates del terremoto del 19-S del 2017 en México, junto a Frida y Evil.
Los Topos de México, así como equipos de rescate de Sedena y Semar están volando a Turquía para unirse a las miles de personas de todo el mundo en la búsqueda contrarreloj de supervivientes bajo los cientos de edificios colapsados en el país.
¡Conócelos!
— Cruz Roja Mexicana IAP (@CruzRoja_MX) February 7, 2023
Ellos son nuestros caninos que viajan a #Turquia en apoyo a las víctimas, todos especialistas en búsqueda y rescate.
Les presentamos a:
🐾Balam
🐕Orly
🐶July
🐕🦺Rex pic.twitter.com/O11zvd7d4z