Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, se reunió durante esta mañana con el presidente Andrés Manuel López Obrador, luego de que éste acusó una “intromisión abusiva” de parte de la agencia para la Administración y Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) al investigar a “Los Chapitos” y el Cártel de Sinaloa del tráfico de fentanilo.
El encuentro duró alrededor de una hora, sin embargo, el representante del gobierno de Joe Biden no quiso dar declaraciones a la prensa.
Durante su conferencia matutina, el presidente afirmó que México y Estados Unidos deben tener cooperación para el combate al fentanilo, pero no puede haber intromisión de agencias, pues la DEA estuvo durante año y medio infiltrada en los más altos niveles de la organización.
Además, se pronunció porque el Departamento de Estado y la Fiscalía pongan “orden” en sus agencias, y ante estas filtraciones que son “cosas vulgares y politiquería” y no un “trato entre países de buena vecindad”.
DEA se infiltró al Cártel de Sinaloa y red de ‘Chapitos’
Según detalla el informe del Departamento de Justicia de Estados Unidos del pasado 14 de abril, durante el último año y medio, la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) se infiltró proactivamente en el Cártel de Sinaloa y la red “Chapitos”, obteniendo un acceso sin precedentes a los niveles más altos de la organización.
“Las acusaciones de hoy envían un mensaje claro a los ‘Chapitos’, el Cártel de Sinaloa y las redes criminales de drogas en todo el mundo de que la DEA no se detendrá ante nada para proteger la seguridad nacional de los Estados Unidos y la seguridad y la salud del pueblo estadounidense”, dijo la gestora de la DEA, Anne Milgram, en un mensaje.
De acuerdo con la funcionaria, los “Chapitos” fueron pioneros en la fabricación y el tráfico de fentanilo hacia los Estados Unidos, inundando al país de esta droga durante los últimos ocho años y provocando la muerte de cientos de miles estadounidenses.