Lilly Téllez cuestiona método de Va por México: Propone 50 puntos a tomar en cuenta

Lilly Téllez, senadora del PAN y aspirante a la candidatura presidencial de Va por México para las elecciones de 2024, cuestionó el método de la alianza opositora a través de 50 preguntas relacionadas con la encuesta, el método de selección y el apego a las leyes del proceso interno.

“Deseo participar en este proceso con el respaldo ciudadano con el que cuento. Sin embargo, quiero tener certeza de que el método es sólido, que no caeremos en actos ilegales, en financiamientos ilícitos o conductas clientelares o corporativas”, dijo la aspirante a través de un comunicado este lunes 26 de junio.

Téllez pidió a Va por México que considere sus cuestionamientos a fin de que incluso una mesa técnica aclare reglas y garantice legalidad y equidad.

El comunicado de la legisladora ocurre horas después de que Va por México estableciera los lineamientos del proceso interno para la selección de su candidato, destacando etapas de selección de aspirantes, desde la recolección de firmas, estudios de opinión pública, foros regionales y una consulta directa, a fin de que el candidato elegido sea nombrado el domingo 3 de septiembre, tres días antes del anuncio de Morena y aliados.

Los cuestionamientos de Lilly Téllez a Va por México

Las 50 preguntas de Téllez se relacionan con la legalidad y solidez del proceso interno y se dividen en tres vertientes:

• Legalidad del método y validación: La legisladora cuestionó si el método ha sido consultado con el Instituto Nacional Electoral (INE) para garantizar que se apegue a la ley, así como la representación formal de los aspirantes en el comité y las condiciones de imparcialidad.
• Financiamiento, fiscalización y transparencia: Téllez dedica 13 preguntas relacionadas con el tope de recursos y las vías de dónde podrían tomar dinero para hacer su campaña. Estas son algunas de las cuestiones destacadas:
• “¿Quién podrá aportar recursos a los aspirantes y cuál será el tope individual y total de financiamiento privado?”
• “¿Habrá topes de gasto por aspirante?”
• “¿En qué actividades estará permitido gastar?”
• “En caso de que se contrate personal para recabar el apoyo de la ciudadanía, ¿podrían recibir remuneración por su servicio?”
• “¿Bajo qué mecanismos y ante que instancia se rendirán cuentas?”
• “¿Se presentarán informes de ingreso y gasto?”
• Detalles técnicos de la organización del método interno: A través de seis puntos, la funcionaria panista cuestionó los detalles del método de encuestas, estudios y recolección de firmas:
• Recopilación de firmas: Pregunta cuáles serán los mecanismos válidos para obtener firmas, si se utilizará una aplicación única, la instancia responsable de la protección de datos personales de quienes firmen y si las personas podrán firmar solo por uno o más aspirantes.
• Estudios de opinión: Cuestiona qué criterios se ocuparán en estos, cómo se garantizará que se mide la competitividad de los aspirantes, cuántas encuestadoras participarán y silos cuestionarios serán públicos.
• La consulta directa: Téllez pidió a Va por México esclarecer cómo se integrará el padrón de la consulta, si los aspirantes pueden participar en el proceso de revisión del padrón y si habrá “depuración” de los votos u opiniones de los militantes de partidos ajenos.
• Equidad en la contienda: Las principales cuestiones son cuáles serán las sanciones en caso de que exista ilegalidad en el proceso y si las dirigencias públicas y organizaciones podrán participar en la recolección de firmas en favor de los aspirantes.
• La jornada electoral: Cuestiona sobre los centros de votación, ciudadanos inscritos y difusión de la misma. Además pregunta si los aspirantes podrán designar representantes en os centros de votación o si habrán observadores electorales, además de si habrán métodos de impugnación.
• Resultado del método: Las preguntas de Téllez son qué pasa si un aspirante gana la encuesta pero pierde la elección primaria, si aún se considera a Movimiento Ciudadano y si el ganador de la encuesta de PRI, PAN y PRD, en caso de que exista una eventual alianza con el partido naranja, deberá competir contra su precandidato.