“Se va a castigar a los responsables”, fue la ‘promesa’ del presidente Andrés Manuel López Obrador ante la muerte de una niña de seis años quien murió tras ser prensada en un elevador de un hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
“Muy triste lo de la niña que murió atrapada en un elevador en Quintana Roo. Ya se está haciendo la investigación”, remarcó.
Aitana, una menor de seis años, estaba internada en el hospital del IMSS No. 18 en Playa del Carmen por un cuadro de dengue.
Su muerte ocurrió cuando la camilla en la que era trasladada no fue asegurada correctamente, ya que no entró completamente en el ascensor, provocando que, al accionar el botón para subir, aplastara a la menor.
De acuerdo con Renán Quintal, corresponsal de El Financiero, personal de seguridad privada y los mismos trabajadores del hospital trataron de ocultar los hechos, ya que “nunca realizaron ninguna llamada de auxilio al número de emergencia 911″.
Sin embargo, el IMSS emitió un comunicado en el que aseguran que personal directivo de la unidad médica “dio aviso a las autoridades competentes”.
“No puede haber impunidad”, remarcó el mandatario.
Elevador tenía reporte de fallas
Enrique Leobardo Ureña, delegado del IMSS en Quintana Roo, explicó que se habían reportado el mal funcionamiento del elevador horas antes del accidente.
“Es importante afirmar que previo al accidente, se reportó la falla del elevador a las 13:10 horas. Se hizo conocimiento de la empresa encargada del mantenimiento. Aproximadamente a las 16:00 horas, se presentó el técnico designado por SITRAVEN para la realización de las actividades correspondientes a diagnóstico y mantenimiento colectivo”, dijo en un video publicado en las redes sociales del IMSS.
El delegado puntualizó que los técnicos desplegados por la empresa encargada del mantenimiento se retiraron a las 17:10 horas sin dejar ninguna barrera o advertencia para que el elevador no fuera utilizado.
Con información de Renan Quintal