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Los Petriciolet: Quién es el grupo criminal responsable de la muerte del hijo de Alejandro Martí

Los Petriciolet eran conocidos por dejar una flor sobre el cuerpo de los secuestrados que asesinaban. Se estima que operaron entre 2002 y 2008.

Los Petriciolet dejaban una flor en los cuerpos de las personas que asesinaban. (Cuartoscuro)

El empresario Alejandro Martí murió la tarde de este lunes 24 de julio. El dueño de Deportes Martí y la fundación México SOS será recordado por sus aportes en el deporte y también por la forma en la que reclamó justicia por el secuestro y asesinato de su hijo a mano de la banda de la Flor, también conocidos como Los Petriciolet.

Fue el 4 de junio de 2008 cuando Fernando Martí, hijo del empresario, fue plagiado por la banda de secuestradores para ser encontrado 53 días después en la cajuela de un auto con reporte de robo en la colonia Pedregal de Carrasco, en la alcaldía Coyoacán.

El reporte indica que tenía un mes de haber sido ejecutado, esto a pesar de que Alejandro Martí pagó el rescate por un monto millonario.

Días después, Alejandro Martí se presento frente al Consejo Nacional de Seguridad y reclamó al gobierno de Felipe Calderón, al que le dijo “si no pueden, renuncien”, una frase que se popularizó y le representó con el paso de los años.

¿Quiénes son los Petriciolet?

Los Petriociolet, también conocidos como La Banda de la Flor, fue una célula delictiva dedicada principalmente al secuestro en la Ciudad de México y el Estado de México de 2002 a 2008. Era liderdada por Abel Petriciolet, sentenciado en septiembre del año pasado a 384 años de prisión.

En 2009, el Gobierno Federal dijo que se le atribuyen al menos 14 secuestros y 23 víctimas, que normalmente son empresarios o hijos y familiares de estos, en compañía de choferes o escoltas.


Su modus operandi consistía en elaborar falsos retenes en vialidades del Valle de México. Los integrantes de la banda usaban vehículos e insignias de corporaciones policiacas, lo que bastaba para interceptar a sus víctimas.

Una vez lograda la detención, los miembros de Los petriciolet decían a sus víctimas que tenían órdenes de aprehensión y se los llevaban bajo ese pretexto.

Las autoridades les consideraban como una de las asociaciones de secuestro más violentas en la capital del país, ya que mataban a los choferes o acompañantes de los empresarios o familiares de estos a fin de presionar para obtener el dinero rescate que pedían.

A la hora de cobrar, Los Petriciolet daban teléfonos celulares para organizarse con la familia de los secuestrados, además de que les exigían dejar el dinero del rescate en el asiento del copiloto de su vehículo, que debía estar estacionado en una vía rápida o puente.

A las víctimas, Los Petriciolet les dejaba una flor, y de ahí se generó el apodo.

La Secretaría de Seguridad Pública del gobierno de Felipe Calderón dijo que Los Petriciolet tenían casas de seguridad en el sur de la Ciudad de México, una en Xochimilco y otra más en Tlalpan. El operativo desplegado por las autoridades en aquellos años se debió a labores de vigilancia permanente en la zona, lo que permitió rescatar a dos víctimias de secuestro y detener a miembros de la banda.

Uno de los detenidos en aquel operativo era Noé Robles García, quien se encargaba de coordinar la custodia de los secuestrados y admitió haber asesinado a Fernando Martí y a Antonio Equihua, otro joven de 16 años también secuestrado por Los Petriciolet.

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