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A una semana del paso de ‘Otis’ en Acapulco: colonias populares, en el abandono de las autoridades

Las colonias populares de Acapulco reclaman la ausencia de los tres niveles de gobierno, señalan que no han recibido apoyos.

Ante la falta de apoyo habitantes de Acapulco han cambiado su rutina diaria, en la que incluyen un tiempo considerable, de entre tres y cinco horas, para buscar dónde se están entregado los apoyos como agua, despensas, e incluso, puntos de luz. [Fotografía. Rogelio Morales Ponce/Cuartoscuro]

Habitantes de las colonias periféricas de Acapulco acusaron ayer –a ocho días de que el huracán Otis devastó este destino– falta de atención por parte de los gobiernos municipal, estatal y federal.

Desde los primeros días, y aún ayer, han acusado que la ayuda humanitaria, de remoción de escombros y limpieza, se ha concentrado en la parte turística y han abandonado a la periferia.

“No tenemos agua, no tenemos luz, no nos ha llegado ninguna despensa, nada, estamos abandonados”, lamentó ayer Araceli Escalante, vecina de la colonia La Mira.

-El Presidente dice que ya se están entregando apoyos.


-No, nada, nada, eso es mentira, es la gran mentira, ni siquiera lo hemos visto aquí ayudándonos, estamos abandonados –respondió.

Dijo que tampoco la presidenta municipal, Abelina López Rodríguez, ni la gobernadora, Evelyn Salgado, se han presentado en comunidades y colonias fuertemente afectadas por el huracán.

Según el mapeo hecho por las autoridades federales, todo el puerto de Acapulco resultó afectado, pero los mayores destrozos provocados por los vientos sostenidos de hasta 270 kilómetros por hora del huracán Otis, fueron en las partes altas de Acapulco.

Habitantes de colonias como Las Crucitas, La Guinea, Pie de la Cuesta y Palomares, entre otras, recorridas ayer por El Financiero, dieron versiones similares.


Explicaron que ante la falta de apoyo han cambiado su rutina diaria, en la que incluyen un tiempo considerable, de entre tres y cinco horas, para buscar dónde se están entregado los apoyos como agua, despensas, e incluso, puntos de luz.

Por la falta de energía eléctrica también han tenido que buscar dónde poder cargar sus aparatos, principalmente teléfonos móviles.

“Yo vine a cargar mi celular aquí, (a la destruida sucursal de Sr. Frogs) porque la colonia donde yo vivo, allá arriba, a unas cuadras de aquí, no hay luz ni nada, nadie nos ha ido a ver, no todo es la costera”, reprochó.

Otro de los reclamos es la falta de recolección de basura. Todo el puerto está lleno de desperdicios. Sus calles están malolientes y no hay para cuándo retiren los montones de bolsas con basura, escombros, cascajo, que se ven a las orillas de las calles.

Ayer, en la costera Miguel Alemán se vio la presencia de trascabos y camiones de volteo, recogiendo la basura y los escombros. En las calles de las colonias populares todo se ve aún como hace ocho días, como si el tiempo no hubiera trascurrido desde la llegada de Otis.

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