Culiacán, Sinaloa, vivió ayer una jornada violenta, caracterizada por una serie de balaceras, narcobloqueos y pánico entre la población que, para evitar quedar a merced del crimen, tuvo que resguardarse.
Rubén Rocha Moya, gobernador del estado, minimizó el hecho y sólo llamó a mantener la calma. Indicó que la situación se focalizó en una zona rural ubicada a las afueras de la ciudad de Culiacán.
Mientras, habitantes de esa ciudad bautizaron la agitada y virulenta jornada como el “culiacanazo 3.0″, en referencia a dos casos similares, uno de ellos el 17 de octubre de 2019, cuando fue detenido Ovidio Guzmán, hijo del Chapo Guzmán, y luego liberado por orden del presidente Andrés Manuel López Obrador.
De hecho, ayer se especuló sobre la detención de un capo de alto rango del Cártel de Sinaloa, pero, por la noche, tanto autoridades locales como federales negaron tal detención.
“No hay bajas, no hay personas heridas ni detenciones, no existe ningún dato al respecto, de tal manera que todo está en calma”, dijo el gobernador.
La Secretaría de Seguridad Pública de Sinaloa reportó que personal militar sufrió una agresión en el ejido Peñasco, en Culiacán, y pidió a la población calma, pues, dijo, la situación ya se estaba atendiendo. Añadió que hubo bloqueo en el Limón de los Ramos, sobre la carretera México-15.
El titular de la dependencia, Gerardo Mérida, detalló que el primer ataque se registró a las 14:35 horas de ayer, aproximadamente.
Mientras que Juan de Dios Gámez, alcalde de Culiacán, aseguró que los hechos registrados se focalizaron y, al igual que el gobernador y la policía, llamó a la población a mantener la calma y sólo hacer caso a reportes oficiales.
Derivado de acciones de las fuerzas de seguridad del Gobierno Federal, en la sindicatura de Jesús María, al norte del municipio de Culiacán, se han registrado hechos de inseguridad focalizados en esa zona, sobre la Carretera México 15.
— Juan de Dios Gámez Mendívil (@JuandDiosGamez) August 29, 2024
Informes obtenidos por medios de comunicación refirieron enfrentamientos entre militares y civiles en el poblado Paredones, perteneciente a la sindicatura de Jesús María, donde fue capturado Ovidio Guzmán, el 5 de enero de 2023.
En la zona se incendiaron camiones y un tráiler fue atravesado en la carretera internacional, en la salida norte de la ciudad.
Las actividades escolares, comerciales y laborales se pausaron en toda la ciudad y poblados aledaños; la gente que pudo regresó a sus domicilios para resguardarse, ante los bloqueos carreteros en la zona norte de Culiacán.
En el centro de la capital del estado los negocios adelantaron sus cierres e instituciones, como la Universidad de Sinaloa, también suspendieron actividades. Parte de los concesionarios del transporte público también suspendió labores. Mucha gente tuvo que regresar a casa caminando. Videos en redes sociales evidenciaron los hechos.
Asimismo, hubo balaceras en poblados cercanos a Jesús María, como Paredones, Mojolo y El Limón, ubicados a unos 50 kilómetros al norte de Culiacán.
En la zona se observó la volcadura de un vehículo militar y otros más averiados por ‘ponchallantas’ (puntas de acero de fabricación artesanal) que fueron tirados sobre el camino pavimentado que conduce a Paredones a la altura de Mojolo.
Se reportó que los grupos armados no dejaban entrar al ‘gobierno’.
La tarde del 29 de agosto, #Culiacán, #Sinaloa, vivió bloqueos, quema de vehículos y enfrentamientos entre civiles armados y fuerzas de seguridad.
— El Financiero (@ElFinanciero_Mx) August 30, 2024
📸 Cuartoscuro pic.twitter.com/tHuWoNmbwk
Las autoridades federales y estatales redoblaron las acciones de patrullaje y vigilancia en esa ciudad, con el fin de regresar a la calma. En la zona se observaron, incluso, sobrevuelos de naves militares.
El Ejército mexicano no informó si, al final de la jornada y derivado de los enfrentamientos, hubo personal militar herido o unidades afectadas. Se espera que este viernes se conozca el parte que, posiblemente, podría ser dado a conocer en la conferencia matutina del presidente López Obrador.