El presidente Andrés Manuel López Obrador termina su sexenio con 68 por ciento de aprobación ciudadana a su trabajo, de acuerdo con la más reciente encuesta nacional de EL FINANCIERO, realizada a mil 100 ciudadanos en septiembre.
De acuerdo con la serie histórica de encuestas realizadas por este encuestador, el registro final de aprobación del mandatario es el segundo más alto desde Ernesto Zedillo, quien dejó la Presidencia de México con un respaldo de 69 por ciento; Vicente Fox y Felipe Calderón obtuvieron 60 y 61 por ciento en su último mes, mientras que Enrique Peña captó 30 por ciento.
Según el sondeo, las mejores evaluaciones que obtuvo López Obrador, considerando sus seis años de gobierno, fueron en los rubros de derechos de las mujeres, economía, así como empleos y salarios, los cuales obtuvieron por arriba de 50 por ciento de opiniones favorables.
En temas como educación, salud y pobreza, la opinión positiva no alcanzó 50 por ciento, pero sí se registró más de 40 por ciento de apoyo, mientras que en justicia, seguridad y corrupción la opinión favorable estuvo por debajo de 40 por ciento. En los casos de seguridad y corrupción, las opiniones negativas superaron a las positivas. Al comparar la evaluación de hoy con las expectativas que se tenían en noviembre de 2018, poco antes de que el Presidente tomara posesión del cargo, la opinión de que se iba a mejorar en economía, en seguridad y en corrupción alcanzaba 70, 67 y 63 por ciento. Muchas de esas expectativas quedaron sin resultados.
No obstante, el sondeo revela que 60 por ciento opina que López Obrador cumplió con todas o con la mayoría de sus promesas, superando al 40 por ciento que en noviembre de 2018 creía que iba a cumplir de esa manera. En esta pregunta, la evaluación superó a las expectativas. Por otro lado, 62 por ciento de entrevistados manifestó que el país se transformó mucho o algo en estos seis años.
Al preguntar qué calificación le pondrían al gobierno de López Obrador por los resultados obtenidos en su sexenio, el mandatario alcanzó un 7.
El sondeo arroja algunos aspectos que ponen en tela de juicio las interpretaciones del oficialismo y del mismo López Obrador al terminar su administración: por ejemplo, 57 por ciento de la gente entrevistada considera que la reforma judicial no es un mandato del voto del 2 de junio; por otra parte, 40 por ciento no cree que México tenga un mejor sistema de salud que Dinamarca, como solía decir el Presidente. De hecho, al pedir que evalúen al sistema de salud, 49 por ciento calificó positivamente al sistema IMSS-Bienestar, mientras que 59 por ciento le dio una nota positiva al extinto Seguro Popular.
El Presidente se despide con un amplio respaldo social, pero también dejando varios pendientes que señala la ciudadanía.