La presidencia de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) también debería ser electa por el pueblo, propuso Marko Cortés, dirigente del PAN, a la bancada de Morena y aliados en el Senado.
“Presenté ante la Mesa Directiva una iniciativa de reforma a la Constitución para que la titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos sea electa con el voto popular de las y los mexicanos, se supone que es la gran defensoría del pueblo”, dijo.
La propuesta de Cortés se da en el contexto de la elección de jueces y ministros que está programada para realizarse en 2025, esto con todo y que Morena y aliados tendrán que hacer una reforma a la reforma judicial por un error.
“Le diría al gobierno morenista. ¿Qué objeción tendrían en que esta comisión, que hoy es un cero a la izquierda, pueda ser electa por todo el país?”, retó a los senadores de la 4T.
Destacó que es una forma de garantizar justicia, y no como lo que se está haciendo con la reforma judicial, cuyos cargos requieren nivel de tecnificación y capacidad, no sólo “popularidad”.
“Va a defender de cualquier abuso de poder, por ello quiero lanzar el reto al régimen morenista de que acepten que se pare la convocatoria que están emitiendo para renovar la comisión de Derechos Humanos y cambiemos la forma de elegir a su titular. Hagamos que sea el pueblo bueno y decida quién es la persona titular de esta comisión”, lanzó.
Al panista se le cuestionó si con esa elección no se le metería más presión al Instituto Nacional Electoral (INE), pues tendría que organizar esa elección.
“Sí, claro, implicaría una elección formal, pero quienes lo están presionando es el Gobierno”, aclaró.
Marko Cortés indicó que el PAN pide “mínima congruencia” a los morenistas o de lo contrario demostrarán que quieren seguir teniendo una Comisión Nacional de los Derechos Humanos que no diga nada de los abusos del Gobierno.
Actualmente, las comisiones de Derechos Humanos y Justicia del Senado alistan la convocatoria para renovar la presidencia del organismo autónomo.
La mayoría de Morena ha expresado la viabilidad para que Rosario Piedra Ibarra, afín a la 4T, sea reelecta en el cargo, aunque la misma activista propuso que el organismo desaparezca junto con otros como el INAI y la Cofece.
“Estamos convencidos de que es necesario que la Defensoría Nacional de los Derechos del Pueblo emerja como una institución nueva”, dijo en su comparecencia en San Lázaro en enero de este año.