CIUDAD DE MÉXICO.- Una vez que se publicó la investigación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) sobre la muerte de Julio César Mondragón, la familia del normalista de Ayotzinapa dijo que con ello apenas inicia el camino para lograr verdad y justicia.
Advirtió que es fundamental que la Unidad de Investigación del caso Iguala de la PGR abra una línea de investigación que se avoque a la investigación de los delitos cometidos contra Julio César.
A casi 22 meses de los hechos ocurridos el 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero, la familia de Julio César mostró preocupación por la insuficiencia de la investigación que condujo la Procuraduría de Guerrero. Recordó que como parte de la búsqueda de la verdad del caso, la familia del joven asesinado pidió tres dictámenes, uno de la causa de muerte, otro de exhumación y el último de identificación.
Consideró que ello contribuirá para que las autoridades hagan las investigaciones pertinentes para el acceso a la verdad y justicia; y ratificó su plena confianza en el peritaje del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF).
Asimismo, instó a la PGR a cumplir a cabalidad las observaciones de la CNDH para que el caso no quede en impunidad.
"Para la familia es desesperante no tener certeza de lo que ocurrió con Julio César, pero resalta que por ahora es más relevante la nueva información sobre la cantidad y distribución de las fracturas, y hacen un llamado a la investigación integral", dijo a través de un comunicado.
Agregó que la exigencia está en que se logre esclarecer los hechos para que ésta y las otras familias puedan tener, por fin, un esclarecimiento de los hechos y castigo a los verdaderos responsables.