CIUDAD DE MÉXICO.- El Instituto Nacional Electoral (INE) requirió a la Secretaría de Hacienda (SHCP) alrededor de 500 millones de pesos para organizar la elección del Constituyente, pero en su presupuesto de más de 11 mil millones tiene considerados proyectos cuya utilidad no se ha hecho pública, que han sido cuestionados por sus propias instancias o cuyos montos se han elevado sin explicación alguna.
En total, el instituto recibió del erario público 15 mil 473 millones de pesos, pero 4 mil 31 millones los entregó a los partidos políticos con registro.
El resto, lo ha ejercido sin recorte alguno, mientras que dependencias federales han sufrido disminuciones en su gasto como consecuencia de crisis económica internacional.
Y si bien, el instituto asegura que no tiene alrededor de 500 millones de pesos para pagar los gastos de la elección de 60 integrantes del organismo que se encargará de aprobar la Constitución de la Ciudad de México (en la que solo consiguió 28 por ciento de participación), si tiene dinero para mantener 35 mil 478 plazas de base y honorarios, pues los diputados le autorizaron más de 7 mil millones de pesos para los salarios, de acuerdo con su estructura ocupacional publicada en el Diario Oficial de la Federación.
Y que no haya dinero para el Constituyente no quiere decir que no existan recursos para construir su nueva sede: el fideicomiso creado exprofeso ya cuenta con mil 755 millones 524 mil 883 pesos. Aunque el área administrativa del instituto aseguró que la construcción iniciaría en mayo, hasta ahora, solo hay el anuncio de que están en vías de licitar el proyecto ejecutivo para el que destinarán 743 millones 950 mil, es decir, más de la mitad del costo total de la obra fijado en mil 100 millones de pesos.
PERLAS DEL GASTO
El presupuesto del INE para 2016 hay dinero para rubros cuestionados.
Por ejemplo, están contemplados 79 millones 690 mil 748 pesos para el programa de sustitución de vehículos propios a través del arrendamiento, ello, pese a que la Contraloría del instituto constató que la figura del arrendamiento era entre 46 y 53 por ciento más cara y así lo informó al Consejo General del INE.
La recomendación incluso se contrapone a las medidas de racionalidad en el gasto aprobadas, en las que el instituto insiste en dar prioridad al arrendamiento de vehículos. La publicación de estas medidas se realizó tres meses después de que la Contraloría hiciera esta observación.
Además, aunque su presupuesto contempla 176 millones 522 mil 480 pesos para otorgar un bono electoral con motivo de las labores extraordinarias derivadas de los procesos electorales locales de 2016, la Junta General Ejecutiva elevó el gasto y aprobó recursos por 214 millones de pesos para ese fin, so pretexto de la elección del Constituyente.
Sobra decir que esta aprobación se dio pese a que, oficialmente, la SHCP no había transferido recursos al INE para la única elección que le tocó organizar en su totalidad.
El instituto también tiene presupuestados rubros cuya utilidad no ha quedado clara, por ejemplo, destina un millón 140 mil 78 pesos para "mejorar el protocolo para prevenir, atender y sancionar casos de hostigamiento y acoso sexual o laboral".
Sin embargo, el escándalo reciente en su coordinación de Comunicación Social evidencia que el protocolo no operó, pues las denuncias sobre acoso laboral contra funcionarios del área tenían casi un año de presentadas y no recibieron atención.
Este rubro incluye otros 500 mil pesos para el "diseño de una política institucional de conciliación entre la vida laboral y personal", cuyos resultados tampoco están claros.
El organismo público encabezado por Lorenzo Córdova también contempla en su presupuesto una partida de 825 mil pesos para el concepto "clima organizacional en condiciones de igual para la fiscalización" y 2 millones 900 mil pesos para "acciones de igualdad desde la fiscalización".
Este mes, el INE comienza los trabajos para integrar su proyecto de presupuesto para 2017.