CIUDAD DE MÉXICO. Casas fracturadas en las paredes o en los techos, otras con severas inclinaciones, drenajes insuficientes que provocan la salida de las aguas negras por las coladeras, son parte de los saldos negativos que dejó la Línea Dorada, que suspendió su operación en 11 de las 20 estaciones, desde el 12 de marzo del año pasado.
En las delegaciones, Tláhuac, Iztapalapa, Coyoacán y Benito Juárez los vecinos han pagado altos costos por la construcción de esta línea, que sólo estuvo cinco meses operando en todas sus estaciones por fallas en trenes y vías .
Algunas de las viviendas dañadas se encuentran muy cerca de la estación del metro Zapotitlán y de la terminal Tláhuac, a no más de tres metros de un enorme pilar de los muchos que sostienen el tramo elevado.
1
Presentan cuarteaduras en los techos, grietas en las paredes que tuvieron que ser reparadas por los propios dueños, pues el agua se trasmina. Los suelos también están dañados y en algunos puntos parece que se están carcomiendo y en temporada de lluvias la situación se complica.
También presentan daños en el drenaje, pues aseguran que la llamada Línea Dorada afectó la infraestructura y los tubos no tienen la misma capacidad. Desde las obras, los vecinos aseguran que las aguas negras salen por excusados y coladeras de las viviendas, y en temporada de lluvias, el agua alcanza hasta el metro y medio de altura.
"Antes teníamos un drenaje grande una tubería de 36 pulgadas, ahora nos pusieron uno de 15 pulgadas y cada que llueve nos inundamos en un metro de puro lodo. Solo pusieron registros pero no sirven porque por ahí sale todo el lodo y todo se mete a las casas", dice una de las vecinas afectadas.
En otra de las casas los techos están a punto de caer, incluso tuvieron que colocar trabes para que no colapsen. Lo mismo sucede en las delegaciones Benito Juárez y Coyoacán, las casas tienen fracturas en paredes y techos, y algunas casas presentan inclinaciones.
1
Ante esta situación y luego de varias movilizaciones en 2011, algunos vecinos afectados en las demarcaciones mencionadas lograron que la empresa Ingenieros Civiles Asociados ICA, en asociación con Alstom y Carso, y responsable de la construcción de la línea 12, realizara dictámenes para determinar si las la fracturas y daños son por el desgaste natural o por la construcción del metro. De esta forma ICA se convirtió en juez y parte del problema.
Revisó las afectaciones con su propio personal a través de la aseguradora Grupo Mexicano, lo cual significó para los afectados "un hecho amañado", pues en la mayoría de los casos el dictamen fue que los daños causados, son previos a la obra de la llamada Línea Dorada, obra estrella de Marcelo Ebrard.
Aunque en algunos casos confirmaron un pago por remoción de escombros y reparación del edificio, a la fecha no ha sido entregado. Y aún hay viviendas en donde no han hecho la evaluación.
Los vecinos inconformes lograron que se establecieran mesas de trabajo con autoridades del gobierno del Distrito Federal, pero el 14 de noviembre de 2014, fecha en que acordarían el pago por los daños, la Secretaría de Obras del gobierno capitalino rompió la negociación.
El diputado federal del PAN, Jorge Sotomayor, e integrante de la Comisión Especial para el Seguimiento al Ejercicio de los Recursos Federales destinados a la Línea 12 del Metro, solicitó a Alfredo Hernández García, secretario de Obras del DF, y al Secretario de Gobierno, Héctor Serrano; que designen una partida para resarcir los daños a los vecinos.
Calificó a la Línea Dorada como "El robo más grande que hemos tenido en el DF. Al día de hoy se han gastado más de 55 mil millones de pesos y no hay una obra que funcione cuando el presupuesto inicial era de 24 mil millones de pesos y con la reparación se triplicará".
Adelantó que los resultados que solicitará se anexen a dicho documento, son: que los trenes que se pusieron son incompatibles y que tienen un sobreprecio del 50 por ciento.
Además, que las reparaciones a los trenes no debieran estar concesionadas a la empresa CAF, sino directamente a los trabajadores del metro. Dijo que es muy evidente que hubo un enriquecimiento ilícito.
Jorge Sotomayor, aseguró que hubo irregularidades en las concesiones y señaló como el principal beneficiado al hoy senador Mario Delgado, entonces secretario de finanzas del gobierno del Distrito Federal, de la que fuera una de las principales obras del Gobierno de Marcelo Ebrard.
"Marcelo Ebrard es una pieza fundamental, pero quien pone su firma en los documentos, quien dirigió las adjudicaciones directas y quien puso el dinero para la línea 12 fue Mario Delgado", declaró el diputado.