Comenzando el año se presentó un reclamo al Tec de Monterrey (Disclaimer: soy maestro del Tec por más de 20 años y lo escrito aquí es una opinión estrictamente personal) por “dar de baja a maestros en diciembre para recontratarlos en enero”. El Tec aclaró ese mismo día el estatus y las prestaciones -por encima de ley- de las que gozan los maestros de cátedra. Ellos son profesionales que generosamente comparten sus conocimientos y experiencia, solo que no buscan dejar su actividad profesional primaria. No le beneficia a la Universidad en sí misma, sino a los alumnos que son a quienes va encaminado ese completo paquete pedagógico que conjuga tanto la teoría como la praxis.
Puede argumentarse que la educación es una de las actividades más “democráticas” -para quienes les gusta de usar esos términos en vez de considerar la calidad u otros atributos-. Sin hacerle a la acreditadora, la oferta educativa va desde las Ivy League (Brown University, Columbia University, Cornell University, Dartmouth College, Harvard University, the University of Pennsylvania, Princeton University y Yale University), así como Stamford, MIT, NYU y Tulane (soy Ex Alumno). La Sorbonne, LSE y otras más en Europa se suman a la lista. En Latinoamérica esta la Pontificia Universidad Católica de Chile.
En Mexico tenemos el equivalente a las “Ivy League mexicanas”: TEC, UDEM, ITAM, IBERO, etc. También están la UNAM y el Poli más las estatales. Además, hay otras privadas con colegiaturas más modestas y calidad adecuada hasta algunas que son medio “shady”.
Hay universidades en línea y además están los MOOCS: a veces son la misma clase del mismo profesor, en forma gratuita. Por si fuera poco, esta You Tube. Muchas aportaciones buenas, otras no tan buenas hasta llegar a la desinformación. Si alguien siente que le “roba” su Univesidad, no le batalle, hay oferta educativa para aventar para arriba.
No solo a nivel Universidad. Tampoco le tienen que batallar los papás que se quejan de los “malos y flojos maestros”. Les pueden enseñar ellos mismos.
Si hay profes que sufren y son vistimas de alguna Universidad, vuélvanse influencers de la materia que impartan en You Tube. Mejor aún, júntense y funden su propia universidad, den trabajo a otros profes y páguenles lo que esos profes se merezcan. Esto aplica a todo: no le batalle y sufra con lo opresivo que son los patrones y creen trabajo. La figura de la cooperativa existe desde los años 40′s.
Los ex alumnos de las universidades americanas contribuimos poco o mucho a nuestra Alma Mater. Hay quienes hasta les dejan parte de su herencia. Que contraste con los exalumnos que salen con la sensación de que la escuela les “robó” con colegiaturas “exorbitantes” (el drama por delante). Si la educación se les hace cara, prueben la ignorancia. En otros tiempos si salía cara, ahora los ignorantes acaban en la innoble, perniciosa (el cálculo político es otro cáncer) pero lucrativa profesión de político.
Extrapolando no solo en materia educativo: que lejos estamos de ser una sociedad a la que Kennedy le lanzó la consigna de “no preguntes que puede hacer tu país por ti, sino que puedes hacer tú por tu país”.
Escoja la avenida que más le guste y le convenga para educarse, pero aplique el concepto de Life Long Learning (Aprender durante toda la vida) porque no estudiar te hace no saber que no sabes. Cuando te rodeas de gente que no sabe que no sabe, aparte de ser una forma de corrupción en el gobierno, el que da la cara -y queda mal- es el jefe.