Alberto Muñoz

Amazon quiere comprar iRobot y los organimos antimonopolio reaccionan

El motivo es que las aspiradoras, casi 100 millones de iRobots, ya están presentes en los hogares e industrias.

“Hace muchos años, te fuiste de Australia para estudiar en los Estados Unidos y ahora ¿vendes aspiradoras?” Esta frase la dijo la madre de Rodney Brooks, cofundador de iRobot en 1990. Hoy en día, la posible adquisición de iRobot por Amazon es un tema de discusión intensa en las instituciones reguladoras de competencia en todo el mundo.

Amazon ya nos ha conquistado con “Alexa”, pero a diferencia de Alexa - que todavía no camina ni vuela - las aspiradoras de iRobot ya recorren nuestras casas, no solo limpiando, sino también recopilando datos que pueden ser usados para conocer sobre nuestra vida diaria. El motivo de que Amazon quiere comprar iRobot no es que sus ingenieros no puedan construir o fusionar sus desarrollos para crear aspiradoras de nueva generación, sino porque las aspiradores, casi 100 millones de iRobots, ya están presentes en los hogares e industrias. El mercado global de aspiradoras robóticas se espera que crezca hasta los 50,65 mil millones de dólares en 2028, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 27,2% entre 2021 y 2028.

Estas aspiradoras son máquinas de limpieza automatizadas con software inteligente, sistemas de navegación inteligentes, potencia de succión ajustable y mecanismos de programación. Se prevé que su adopción aumentará debido a sus beneficios, como el ahorro en recursos humanos.

Brooks, tras terminar su doctorado, se desilusionó con la investigación en inteligencia artificial, especialmente con el enfoque top-down. Esta perspectiva presupone que primero se debe proporcionar a los algoritmos una representación interna de las características “esenciales” del mundo en el que operan, un reto inmenso para todas las tareas excepto las más simples.

Brooks propuso invertir este enfoque, argumentando que la investigación en IA debería centrarse en un enfoque bottom-up, es decir, enfocándose en la acción y el comportamiento más que en la representación y la función.

Así, comenzó a construir robots que realizaban acciones simples “tipo insecto”. Aunque ni Brooks ni nadie razonable diría que los insectos tienen cerebros sofisticados, estos pueden exhibir comportamientos bastante elaborados. Del mismo modo, los robots de Brooks mostraron comportamientos sorprendentemente complejos, algunos incluso llegaron a explorar Marte.

Las empresas más importantes en el mercado global de aspiradoras robóticas incluyen a Proscenic (China), Matsutek Enterprises Co. Ltd. (Taiwán), Neato Robotics (EE.UU.), Koninklijke Philips N.V. (Países Bajos), Robert Bosch GmbH (Alemania), Panasonic Corporation (Japón), Sharp Corporation (Japón), Bissell Inc. (EE.UU.) y Miele & Cie. KG (Alemania). Cada una de estas empresas contribuye de manera significativa a este enorme mercado con sus avanzadas tecnologías y productos, aunque la las agencias dedicadas a la prevención de monopolios en el mercado siguen de manera particular muy de cerca el caso Amazon-iRobot.

Seguramente, las demás compañías estarán inmersas en disputas similares en los próximos años, sobre todo por lo escandalosa que ha sido la disrupción que ha traído consigo el uso masivo de técnicas de inteligencia artificial, tema en el que Brooks ha tenido opiniones controversiales en los medios públicos. Recientemente, Rodney escribió en su blog “Cálmense, gente. No tenemos una inteligencia artificial súper poderosa a la vuelta de la esquina, ni el fin del mundo causado por la IA a punto de caernos encima” en respuesta al posicionamiento que han venido tomando algunos líderes empresariales de las Forbes 500.

Vivimos en una era en la que los negocios tecnológicos van permeando todos los aspectos de nuestra vida, desde cómo trabajamos y nos comunicamos hasta cómo nos entretenemos y aprendemos. Es esta demanda incesante de financiamiento a las nuevas tecnologías que incluyen algún tipo de soluciones basadas en I. A. e impulsadas por parte de todos los sectores de la sociedad lo que está impulsando la rápida evolución de la inteligencia artificial y la robótica.

Esta tendencia se verá reflejada en las generaciones futuras de ingenieros y científicos que elegirán estudiar tecnología e ingeniería debido a las posibilidades ilimitadas que ofrece el uso masivo de datos. Ellas y ellos serán los responsables de crear y dar forma a la tecnología del futuro y así sus madres, al igual que la madre de Brooks, también podrán sorprenderse al descubrir las increíbles aplicaciones de la tecnología que desarrollarán.

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