Con seguridad alguien te preguntará el próximo 31 de diciembre: “¿Qué propósitos tienes para 2023? Y en la mayoría de los casos se responde con ocurrencias obvias o evasivas. El final de un periodo es una buena excusa para pensar sobre el que viene, pero la construcción de esas metas debe de partir de un ejercicio de reflexión con profundidad.
Todo momento es especial y este tiene sus características, como la elevada inflación que ha minado el poder adquisitivo de los ingresos y del patrimonio, si no está bien invertido. Por eso, más que nunca, es conveniente incorporar las finanzas personales a los propósitos.
1.- El paso inicial es determinar cómo estamos en los principales aspectos, como son los ingresos, gastos, impuestos, inversiones, deudas, seguros, etc. Es decir, hacer un diagnóstico y de ahí arrancar en lo que se quiere corregir o mejorar. De hecho, en la entrega anterior (EF, 27 nov.) te sugería una metodología al respecto.
Pongamos, por ejemplo, que identificas un endeudamiento excesivo con tarjetas de crédito y decides arreglar esta situación para el próximo año.
2.- Recordemos, las metas deben ser específicas, de tal manera que sean medibles y alcanzables. Para ello, habrá que disponerla en el tiempo e ir midiendo el avance, conforme a lo programado.
Siguiendo con el mismo caso, puedes fijar el objetivo como “dejar el saldo de las tarjetas en cero” para finales del año que viene. Por lo tanto, se estipula ir pagando, además de lo que se consuma, una parte del pasivo y establecer la cantidad para cada uno de los meses.
3.- Con el propósito claro, es factible instrumentar una estrategia que sería contestar al “¿cómo voy a lograrlo?”
Continuando con el ejemplo de las tarjetas, implicaría ajustar gastos o buscar ingresos extras. En consecuencia, es fundamental precisar acciones claras, pues de otra forma estaremos al término de 2023 justificando el incumplimiento de lo prometido.
4.- ¿Qué más? Hay complementos que pueden añadirse a la estrategia, porque probablemente se deba aprender de ciertos temas, como invertir en los mercados; organizar tus cuentas a través de un presupuesto o capacitarse para obtener una mejor posición en la compañía. Incluso, definir qué hábitos vale la pena adquirir o erradicar para llegar a tus objetivos.
Así, cuando te pregunten, ¿cuáles son tus propósitos? Podrás responder con orgullo los que tienes en mente y sabes el camino para alcanzarlo.
¿Ya definiste tus propósitos para 2023? Coméntame en Instagram: @atovar.castro