Directora de Análisis y Estrategia en Intercam Casa de Bolsa

Consideraciones respecto del último incremento de Banxico

El alza de 50 puntos base por parte del banco central confirma el compromiso con su único mandato, que es lograr la estabilidad de precios.

La última decisión del Banco de México fue sorpresiva por la magnitud del alza y por ser unánime. De acuerdo con la última encuesta por parte de Citibanamex, el 100 por ciento de los analistas encuestados esperaba un incremento de 25 puntos base, ya que desde el año pasado había replicado uno a uno los movimientos de la Reserva Federal.

La decisión ha sido cuestionada, por un lado, porque la inflación si bien se aceleró, lo hizo en línea con los estimados, y por otro, porque Banxico se había anticipado en el comienzo del ciclo restrictivo. ¿Qué fue lo que empujó al organismo central a mantener el ritmo de alzas en las tasas de interés y no moderar la magnitud como era ampliamente anticipado, tal y como lo hizo la Fed?

Yo encuentro la decisión acertada, por varias razones. La mayor parte de nuestra inflación es importada. El componente de mercancías alimenticias ha mostrado una incansable trayectoria de alza; de acuerdo a la última lectura se ubicó en 14.08 por ciento. Estimo que, una franca apreciación del peso contribuiría a lograr una trayectoria de baja en la inflación subyacente, que ha mostrado 25 incrementos en los últimos 26 meses. Dada la elevada apertura de la economía mexicana, el tipo de cambio juega un papel importante en la formación de precios. El impacto de la tasa de interés sobre la demanda agregada está limitado por el ambiente prevaleciente para la inversión privada (tanto no residencial como residencial), y por el bajo nivel de penetración del crédito bancario en nuestra economía.

Otra razón por la cual resulta adecuado el incremento de 50 puntos base es que el componente de servicios comienza a mostrar señales de alarma. El avance de los servicios se explica –entre otras cuestiones– por el incremento salarial del orden del 11 por ciento, nivel que no se había observado desde el año 2000. Estos aumentos elevan el riesgo de generar una espiral de salarios-precios.

Además, la inflación de alimentos, bebidas y tabaco es muy elevada, y afecta en mayor medida a la población con los menores ingresos, lo que resulta más lastimoso aún.

Por otro lado, es importante señalar que desde que Banco de México incluyó pronósticos de inflación en los comunicados de política monetaria, todos ellos han incluido revisiones al alza en la inflación. Lo mismo ha sucedido con las estimaciones de parte de los analistas, que en los últimos dos años, no han hecho más que revisar sus pronósticos en una trayectoria ascendente. El alza de 50 puntos base por parte del banco central confirma el compromiso con su único mandato, que es lograr la estabilidad de precios. Ello ayuda a fortalecer la credibilidad de una Junta de Gobierno que es percibida con limitada experiencia en materia de política monetaria. Con esto en mente, el incremento está alineado a mantener ancladas las expectativas de inflación en el mediano y largo plazos.

Sin embargo, hay voces que han cuestionado el alza en las tasas de interés por el posible efecto en el crecimiento. Esto, al margen que no hemos presenciado un efecto material en el PIB considerando los datos del 2022 y los indicadores de coyuntura. Hay que recordar que no existe crecimiento sostenible con inflaciones elevadas.

Para las exportaciones, la fortaleza del peso pudiera afectar su competitividad. Empero, hay que recordar que una buena parte de las empresas son globales, y que el componente importado de las exportaciones es importante. Además, en la medida en que se logre controlar el ascenso de los insumos domésticos se fortalecerá la competitividad de las ventas al exterior.

En la medida en que el Banco de México no logre el control de la inflación, el país tenderá a perder competitividad y a debilitar el ya de por sí magro crecimiento económico. Ello con efectos muy adversos sobre la distribución del ingreso en el país.

Ante estas consideraciones estimo que Banxico continuará incrementando las tasas de interés hasta el momento en que la subyacente comience a ceder significativamente.

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