Desde San Lázaro

Ebrard y Xóchitl, pesadillas para AMLO

Cobra fuerza la versión de un rompimiento de Marcelo Ebrard con López Obrador, en caso de que se manipulen las encuestas para seleccionar al candidato presidencial de Morena.

Como sabemos, la prioridad de AMLO en la recta final de su administración, no es mejorar la seguridad pública o abatir la pobreza y la marginación y menos terminar con el desabasto de medicamentos, entre otros múltiples problemas. No, para él lo único que le importa es cómo mantener el poder después de 2024 y para ello, prepara a su corcholata favorita para ganar la elección del próximo año.

Sin embargo, de último momento le surgieron dos escollos de tamaño monumental para cristalizar su sueño guajiro; el primero es la irrupción de Xóchitl Gálvez en el firmamento político, a quien solo le bastó unas cuantas semanas para colocarse en las encuestas a unos puntos de Marcelo Ebrard y de Claudia Sheinbaum, y el segundo obstáculo es precisamente la fortaleza del excanciller, que mediante una precampaña exitosa y el planteamiento de una serie de propuestas para resolver los problemas severos por los que transita México, sigue subiendo como la espuma, a tal nivel que, en cualquier encuesta el ‘carnal’ se ubica entre el primero y el segundo lugar.

Cada vez cobra más fuerza la versión en torno a un eventual rompimiento de Ebrard con el presidente López Obrador, en caso de que el manoseo y manipulación de las encuestas definitivas predomine en el proceso final de selección del candidato presidencial de Morena y rémoras, además de que prevalezca la cargada del grupo radical que se ubica en el primer círculo de colaboradores del presidente y que están incrustados, incluso en los cuadros de dirección del partido en el poder, en el Congreso y por supuesto pastorean a 12 gobernadores de Morena y PVEM en favor de Claudia Sheinbaum.

Los enormes flujos de billete provenientes de empresarios que han sido favorecidos por contratos del gobierno federal, de varias entidades federativas, incluyendo, por supuesto el gobierno de la CMDX, para pagar varios miles de espectaculares en todo el territorio nacional promoviendo la candidatura de la exdelegada de Tlalpan, es tan solo una vertiente que encuera el piso disparejo que prevalece en estos momentos en la contienda entre los suspirantes del oficialismo.

Entonces, vemos que todo se está moviendo para que, a través de encuestas manoseadas, de la cargada de la bufalada del radicalismo y la danza de miles de millones de pesos, se cristalice el parto de los montes para que ocurra la nominación de la exjefa de Gobierno de la CDMX.

A 35 días de que Morena anuncie el nombre de su candidato, las señales son inequívocas sobre el agandalle del oficialismo en contra de Marcelo Ebrard.

No crea, estimado lector, que en el cuartel del excanciller se están chupando el dedo, ya que tienen contemplados diversos escenarios para actuar en consecuencia y uno de ellos, es precisamente poner en la boleta electoral presidencial a su jefe, aunque con otra franquicia política y ello le quita el sueño al principal huésped de Palacio Nacional.

En esta lógica se explica el destape que hiciera AMLO durante su gira por Monterrey el pasado fin de semana, de Luis Donaldo Colosio Riojas y del gobernador Samuel García para que uno de ellos abandere a Movimiento Ciudadano, de Dante Delgado, en su aspiración de ganar la presidencia de la República.

El destape no fue una ocurrencia más de AMLO, sino un movimiento de ajedrez para cerrarle el paso, precisamente a Marcelo Ebrard en caso de que decida romper con la 4T y buscar otra alternativa política que le permita estar en la boleta del próximo año.

El propio Dante Delgado sabe que tiene varias opciones muy competitivas para ganar la Presidencia y una de ellas es MEC (Marcelo Ebrard Causabon).

Una elección a tercios, en mi opinión, favorece al partido en el poder y rémoras, ya que esos inconformes contra el actual gobierno, tendrían dos opciones, una, la del Frente Amplio por México, conformado por el PAN, PRI y PRD y la otra es Movimiento Ciudadano, por ello el presidente también cubre ese franco para que MC no se sume al bloque opositor.

Por eso decimos que el destape de Monterrey pretende ser una carambola de tres bandas tirada por el presidente, para impedir que se aglutinen todos los opositores para apoyar a Xóchitl Gálvez y mucho menos para que Marcelo Ebrard tenga otra opción para buscar la Presidencia.

En cualquiera de los casos, vivimos momentos políticos cruciales en los cuales arrecia el fuego amigo entre las corcholatas, a niveles que ni Mario Delgado y sus compinches podrán poner orden, y si no viene un manotazo de AMLO para que dejen de pasarse sus indicaciones por el arco del triunfo aquellos que comandan la cargada en favor de Claudia Sheinbaum, pues Morena, PT y PVEM se encaminan a su mayor fracaso electoral.

También hay que comentar que Xóchitl no tiene un día de campo para desplazar a Santiago Creel y Enrique de la Madrid; al contrario, la nomenclatura mafiosa del PAN y PRI (aceitados por AMLO) hace de todo para impedir que gane la nominación.

COLUMNAS ANTERIORES

Pausan momentáneamente la reforma al Infonavit
¡Atásquense que hay lodo!

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.