En México, la situación de la niñez demanda una atención prioritaria. Por un lado, recientemente el Comité de los Derechos de los Niños de la Organización de las Naciones Unidas declaró que en nuestro país desaparecen 14 menores a diario o uno cada dos horas, siendo las niñas las de mayor riesgo. Un ejemplo es el expuesto por el Comité al decir que, en el estado de Chiapas, los casos de niños desaparecidos han crecido de manera exponencial, ya que de enero a marzo de 2024 se registraron 111 casos, de los cuales 40 por ciento no ha sido localizado y 22 por ciento corresponde a niñas y adolescentes del sexo femenino.
Luis Pedernera, vicepresidente del Comité, dio a conocer que en la actualidad hay 17 mil 788 niños, niñas y adolescentes desaparecidos, por lo cual hace una recomendación a las autoridades mexicanas a tomar “medidas inmediatas y efectivas para prevenir, investigar y sancionar las desapariciones de niños, incluidas las desapariciones forzadas”. Asimismo, ante la gravedad del asunto, sugiere que se elimine el plazo de 72 horas que se tarda en iniciar la búsqueda de un niño o niña que desaparece, ya que en su opinión la investigación “debe ser inmediata”.
Ante este terrible panorama, el Comité solicitó a México que termine con la impunidad de los delitos relacionados con la desaparición de niños, niñas y adolescentes y que declare causa nacional la lucha contra los homicidios de este sector de la población.
Por otro lado, continúa la problemática de la niñez migrante, pues de acuerdo con la Unidad de Política Migratoria, Identidad y Registro de Personas de la Secretaría de Gobernación (Segob), de enero a junio de 2024, 13 mil 737 mexicanos menores de 18 años fueron repatriados desde Estados Unidos; de ellos, 45.5 por ciento no contó con la compañía de algún adulto.
La nula supervisión o acompañamiento hace que los niños, las niñas y los adolescentes migrantes sean altamente vulnerables y corran peligro al exponerse a enfermedades, detenciones, violaciones, trata de personas, entre otros riesgos.
También según el Instituto Nacional de Migración (INM) el año 2023 alcanzó cifras históricas relativas a eventos de menores de edad en situación migratoria irregular en México, ya que se identificaron 106 mil 778 casos, representando un aumento del 50 por cientocon respecto al 2022.
Ambos fenómenos, la desaparición de menores y la migración infantil, requieren ser atendidos con prontitud, ya que la violencia hacia este grupo social ha aumentado significativamente y la insuficiencia de información no ayuda a mitigar las problemáticas. De hecho, la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) ha denunciado que, en el caso de la migración, “la Unidad de Política Migratoria del Estado mexicano ha dejado de visibilizar acciones del Estado en las que podrían existir violaciones a derechos (como el alojamiento no voluntario y la privación de la libertad) para únicamente publicar información de validez demográfica como lo es el número de niñas, niños y adolescentes en situación migratoria irregular”.
Desde Early Institute hacemos un respetuoso llamado a las autoridades a garantizar la seguridad de los niños, las niñas y los adolescentes con medidas de protección y generación de acciones y políticas públicas que velen por su integridad en todos los ámbitos. De igual modo, sostenemos que la responsabilidad es compartida cuando se trata de garantizar el ejercicio de sus derechos y es nuestro deber alzar la voz en beneficio de su bienestar y cuidado.