Directora del Think Tank Early Institute.

El reclutamiento forzado alcanza a niñas, niños y adolescentes

El reclutamiento forzado pone en riesgo a la población infantil y adolescente de nuestro país y es necesario emprender estrategias que detengan su propagación.

Inicia un año y los problemas de violencia en México siguen generando sucesos lamentables que afectan a niños, niñas y adolescentes. Uno de ellos es el reclutamiento forzado que ejerce la delincuencia organizada en este grupo social. El reclutamiento forzado incluye acciones realizadas por organizaciones criminales como cárteles de droga, familiares criminales y pandillas para incorporar a menores de edad a sus filas y hacerlos delinquir.

En los últimos años, esta problemática ha ido creciendo en el país sin que exista un registro que dé cuenta de lo que se vive en realidad. Sin embargo, entidades como el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPPINA) ya reconocían esta actividad en 2019 y advertían la necesidad de desarrollar un programa de atención para combatirla.

Ante la falta de información, la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) y el Observatorio Nacional Ciudadano publicaron en 2021 el informe Reclutamiento y utilización de niñas, niños y adolescentes por grupos delictivos en México. Acercamientos a un problema complejo, en el que se dice que “entre 145 mil y 250 mil niñas, niños y adolescentes se encuentran en riesgo de ser reclutados o utilizados por alguna agrupación delictiva a lo largo del país”.

En los primeros días de 2025, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana emitió una alerta general a toda la población sobre el reclutamiento forzado de niños, niñas y adolescentes por medio de plataformas y juegos en línea. Este entorno digital es un escenario propicio que se suma a otros factores de riesgo como son la pobreza, la marginación, el abandono, la violencia intrafamiliar, entre otros.

Para evitar que siga creciendo este fenómeno, la Secretaría de Seguridad propuso acciones dirigidas a las madres, los padres y las personas cuidadoras, cuando se habla del uso de la tecnología. Las medidas son: a). Supervisar y fomentar el uso adecuado y responsable de los dispositivos; b). Mantener un diálogo abierto con los usuarios para explicarles los riesgos; c). Establecer horarios de uso; d). Verificar y apegarse a las etiquetas de clasificación de contenido de los videojuegos; e). Consultar la Ciberguía, una herramienta generada por el gobierno federal para conocer los conceptos relacionados con la ciberseguridad.

Así mismo, en su Balance Anual REDIM 2024: Situación de los derechos humanos de niños, niñas y adolescentes en México, la REDIM recomienda “tipificar como delito el reclutamiento y utilización de niñez y adolescencia atendiendo estándares internacionales”.

El reclutamiento forzado pone en riesgo a la población infantil y adolescente de nuestro país y es necesario emprender estrategias que detengan su propagación, privilegiando el respeto de sus garantías y estableciendo alternativas de mejora de sus condiciones sociales.

En Early Institute hacemos un respetuoso llamado a las autoridades para atender esta terrible situación de un modo eficaz e integral. Reconocemos que se trata de un fenómeno complejo y difícil de estudiar; sin embargo, es indispensable enfrentarlo cuanto antes. Es inadmisible que las niñas, los niños y los adolescentes de México sean obligados a cometer atropellos cuando lo que merecen es vivir seguros y recibir toda nuestra atención y protección.

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