La inflación sigue avanzando tanto en México como en la mayoría de las naciones. En Estados Unidos alcanzó el mes pasado el mayor nivel de las últimas cuatro décadas, al llegar a una tasa anual de 8.6 por ciento; mientras que en nuestro país fue de 7.6 por ciento en mayo pasado, en comparación al mismo mes de 2021 y con una tendencia de alza debido a que los precios al mayoreo se incrementaron aún más. Por su parte, los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas han crecido aún más (12.5 por ciento), perjudicando en mayor medida a las familias de menores ingresos, al representar estos productos un porcentaje mayor de sus ingresos.
La explicación de que esto era un fenómeno transitorio debido a la aparición del COVID y el consecuente rompimiento de las cadenas productivas ha ido abandonándose conforme pasan los meses. La otra explicación de que la inflación es resultado de la invasión de Rusia a Ucrania, con la consecuente caída en las exportaciones de diversos granos y energéticos, solo es posible si viene acompañada de expansión monetaria. Si se mantiene constante la liquidez en los distintos países, incrementos en los precios de algunos productos provocarán que los consumidores dediquen una mayor parte de su ingreso en adquirirlos, por lo que tendrán menos recursos para comprar otros bienes, con lo que disminuirá su demanda, bajando sus precios después de un periodo de ajuste. Como resultado el nivel general de precios se mantendrá estable, es decir no habrá inflación, aunque sí se tendrán importantes cambios relativos de los precios.
Estos movimientos derivados de alzas y bajas en la demanda y oferta de los productos y servicios suceden de manera normal en todas las economías de libre mercado y permiten que las decisiones y las transacciones de millones de personas se realicen de manera continua. Para que todo el sistema pueda funcionar se debe tener una plataforma monetaria que sea estable, predecible y segura entre otros requisitos. Por lo mismo, las autoridades correspondientes deben de hacer ajustes de manera continua, ya sea aumentando o reduciendo la liquidez, para que todo este complejo sistema pueda operar.
La inflación aparece cuando ante una crisis los gobiernos la enfrentan con emisión de dinero para así evitar que disminuya la demanda de los demás bienes frente al incremento en el precio de un sector. Esto significa la intervención de las autoridades para evitar los costos del incremento de algún precio. Así ha sucedido en los últimos años, cuando ante el ataque a las Torres Gemelas en Nueva York se reaccionó con incrementos en la liquidez proporcionada por la Fed, al igual que cuando hubo la crisis hipotecaria o la derivada por la quiebra del grupo financiero Lehman Brothers o más recientemente por la aparición del virus del COVID.
La mayoría de los gobiernos en el mundo han seguido la misma política monetaria de Estados Unidos, con algunas notables excepciones, al pensar que la ortodoxia monetaria estaba superada y era posible seguir políticas expansivas sin costos inflacionarios.
La creciente inflación perjudica a la población y a las economías de muy diversas maneras, destacando las siguientes: 1) Descompone el sistema de señales del mercado, al dificultar saber si los aumentos de precios se deben a una mayor cantidad demandada de los consumidores. Con esto los productores y comerciantes no tienen claro si deben de ofrecer más de sus productos, porque existe la posibilidad de que suban aún más. 2) Por lo mismo, los precios dejan de ser señales de abundancia o escasez de los distintos productos. 3) Es muy difícil o imposible identificar señales para los inversionistas de la demanda futura para sus productos, por lo que se reduce el plazo para los distintos proyectos. 4) Destruye el ahorro, sobre todo para las personas de menores ingresos, que no disponen de instrumentos financieros sofisticados, por lo que usan el efectivo como mecanismo de ahorro. 5) Perjudica el ahorro financiero en bancos y otras instituciones, ya que las tasas de interés suben en menor proporción que la inflación. 6) Se castiga a los trabajadores y empleados que tienen ingresos fijos, ya que sus sueldos y salarios crecen en menor medida que los precios. 7) Se castiga a los jubilados por la misma razón, ya que sus ingresos son fijos. 8) Se perjudica al sistema bancario que tiene alta proporción de créditos a tasas fijas. 9) Propicia el encono social, ya que la población no identifica de manera clara porqué ya no le alcanzan sus ingresos para adquirir lo que podía comprar con anterioridad, por lo que buscan los culpables de su situación.
Para enfrentar el actual entorno inflacionario se deben tomar distintas medidas, destacando el equilibrio de las finanzas públicas, la reducción en el gasto no productivo, así como detener el importante incremento de la deuda pública actual. Por otro lado, facilitar el aumento en la producción y la inversión para que se eleve la producción nacional, con lo que se reducirían los incrementos de precios.
El autor es economista.