Competencia 2.0

Cofece recargada

Es de especial trascendencia el reciente nombramiento de Andrea Marván como presidenta de la Cofece. Ha probado que cuenta con los atributos para llevar el liderazgo de la institución.

La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) se ha reforzado y cuenta con una posición muy especial en el contexto regulatorio mexicano actual. El reciente nombramiento de tres comisionados, incluyendo una nueva presidenta, nuevos directores y renovados planes, hacen de la Comisión un regulador que podría cambiar la regulación de mercado.

Hasta hace pocos meses, se comentaban los muchos problemas en Cofece, principalmente la falta de nombramientos que hacían que su órgano de gobierno no funcionara bien. Procedimientos suspendidos, falta de entendimiento con otros reguladores (especialmente el Instituto Federal de Telecomunicaciones y riesgos en términos de su presupuesto.

En poco tiempo, sin embargo, las circunstancias han cambiado para los miembros de ese constitucional autónomo y por ende para la aplicación de las normas de competencia. Se nombró a los tres integrantes del Pleno que faltaban, seleccionándose a expertos en temas de competencia con experiencia dentro y fuera del regulador como Rodrigo Alcázar, Andrea Marván y Giovanni Tapia. En paralelo, también se hicieron nombramientos de directores generales de áreas clave en la Autoridad Investigadora, que darán rumbo a las investigaciones de prácticas monopólicas. Los nuevos directivos igualmente cuentan con una enorme experiencia dentro del regulador de competencia y tienen integridad y capacidad. El presupuesto de este año resultó mejor a lo esperado y parece que las cosas se han alineado al interior del regulador.

Es de especial trascendencia el más reciente nombramiento de Andrea Marván como presidenta de la Cofece. La posición que toma es de un altísimo perfil y a algunos sorprendió por su juventud y por la unanimidad en el apoyo de los miembros del Senado de la República para esta importante encomienda para los próximos cuatro años. Para los expertos en competencia y los cercanos a la Cofece no fue tan grande el asombro, pues Andrea tiene una larga trayectoria en varias áreas de esta institución, incluyendo la investigación de prácticas monopólicas, organización de la Autoridad Investigadora y más recientemente la dirección de los trabajos de promoción de competencia. Hasta hoy, la maestra Marván ha probado que cuenta con los atributos para llevar el liderazgo de la institución. Su integridad, credibilidad y respeto de todos al interior, al igual que en entre los expertos, le dan los elementos fundamentales para llevar este encargo.

Ya se ha anticipado por parte de la nueva presidenta que su objetivo es revigorizar el mandato de la autoridad, avanzar en sus esfuerzos e incluso hacer uso de facultades que hasta ahora no se han utilizado, como por ejemplo las facultades de presentar acciones colectivas o suspensiones cautelares de conductas, entre otros.

El reto al que se enfrenta la Cofece no es menor. En un entorno mundial de autoridades de competencia muy agresivas que están probando sus límites en varias jurisdicciones tanto frente a las empresas como frente a los gobiernos, los retos de intervenir en la economía se incrementan. Las presiones que han venido como resultado de la pandemia, de la inflación, de la digitalización y de la regionalización de los mercados, tendrán a Cofece con el reto de navegar en aguas muy difíciles. A esto hay que agregar las amenazas internas, incluyendo los cambios políticos, que suelen ser un reto para los constitucionales autónomos, independientemente de qué fuerzas políticas triunfen en el cambio.

Por lo que hace a qué pueden esperar las empresas en este nuevo entorno, la respuesta no es clara. Parecería que la capacidad técnica y la seriedad de los funcionarios aseguran decisiones apegadas a derecho y a la ciencia económica, pero al mismo tiempo existe una estrategia de reforzar una agenda más agresiva de parte del regulador, que permite anticipar más investigaciones y un nuevo uso de facultades que podrían poner a algunos gobernados en aprietos. Veremos si estos cambios implican también nuevos criterios en procedimientos y sanciones, pero por lo pronto, ya se siente la renovación del regulador.

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