Claudia Olguín

IA reconfigura oficinas

Las empresas dan prioridad a la adopción de la gestión de la energía y las emisiones, la infraestructura energética inteligente y la presentación de informes de sostenibilidad.

La tecnología gana terreno en la industria inmobiliaria. 80 por ciento de las empresas aumentarán su presupuesto para enfrentarlo.

Parte de esta evolución fue incluida en la primera encuesta global sobre tecnología inmobiliaria aplicada a mil tomadores de decisión por el área Work Dynamics Technology Group de JLL.

En ella, las empresas reconocen el valor estratégico de los bienes raíces para enfrentar la tendencia como un facilitador de nuevos modelos de negocios, la toma de mejores decisiones y una mayor productividad.

Son temas por demás importantes en momentos en que el impacto de tecnologías como la inteligencia artificial (IA), el machine learning, la IA generativa y las tecnologías limpias son parte de la transformación.

El impacto es tal que 91 por ciento de los inquilinos de oficinas dijo estar dispuestos a pagar una prima extra por espacios habilitados para tecnología.

Es la IA uno de los mayores cambios que se ven venir el próximo trienio. De igual manera, las empresas dan prioridad a la adopción de la gestión de la energía y las emisiones, la infraestructura energética inteligente y las herramientas de presentación de informes de sostenibilidad.

Un tema no menos relevante es que los usuarios e inversionistas de oficinas están utilizando estrategias para acelerar la adopción tecnológica. Esto se refleja en el hecho de que 89 por ciento planea mezclar la mejora de las habilidades de la fuerza laboral existente, la contratación de nuevos talentos y la subcontratación y fusiones y adquisiciones que permitan mejorar la capacidad tecnológica.

En contraparte, 78 por ciento piensa recurrir a socios externos para mejorar los resultados tecnológicos.

Por tanto, son tres los imperativos que se marcan como los transformadores del cambio digital de amplio y rápido alcance en la industria. Integrar una estrategia tecnológica viable, construir un modelo operativo resiliente e impulsar nuevas formas de trabajo.

En esta terna de tendencias, es evidente que la tecnología es un hilo conductor para respaldar la flexibilidad, mejorar la toma de decisiones, promover la sostenibilidad y aumentar los ingresos.

Sin embargo, en el sondeo 80 por ciento de las organizaciones dijo que no cuentan con una estrategia viable que identifique cómo el sector respalda sus objetivos comerciales, además de trazar una ruta clara y alcanzable.

Y es que los modelos resilientes están llamados a alinear la gente, experiencia, tecnología y diseño empresarial para el cumplimiento de la visión y la hoja de ruta.

Finalmente, la flexibilidad va más allá de modificar los hábitos de colaboración en los espacios. Se trata de un nuevo enfoque que integra la gestión del cambio y los ciclos de retroalimentación basado en el uso de datos y medidas claras.

Bajo esta ecuación la tendencia indica que el nuevo enfoque tecnológico en los inmuebles corporativos, respalda la aceptación de las empresas líderes por pagar precios mayores en aquellos que aporten mayor suministro tecnológico, en especial las de Estados Unidos.

Detrás de ello están el respaldo de los modelos de negocio, la generación de nuevos ingresos, más productividad y colaboración, pero también la salud y bienestar de los empleados.

Indudablemente este hallazgo echa por tierra la lógica de que la tecnología se orienta sólo en habilitar el trabajo a distancia, con los cambios que implica en la adecuación del espacio. Existe un sentimiento constante en los encuestados de que 80 por ciento no está tomando suficiente valor de la tecnología utilizada.

Son datos que definitivamente llevan a la reflexión.

COLUMNAS ANTERIORES

2024, oportunidades y transformación
Perspectiva y realidad corporativa

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.