Luz Elena González Escobar, Secretaría de Administración y Finanzas del Gobierno de la Ciudad de México
Si vemos hacia atrás, durante el último siglo, no es posible encontrar un momento más inesperado y difícil como el que tuvo que enfrentar nuestra Ciudad en los últimos dos años debido a la inusitada pandemia planetaria.
Y aunque aún no podemos declarar su final definitivo, una combinación de hechos y decisiones permite reconocer la llegada de la recuperación de nuestras vidas, en normalidad y de nuestra actividad económica a niveles, en algunos casos, ya superiores que los del año 2020.
La vacunación de la Ciudad ha sido el esfuerzo más vasto, masivo e incluyente de todo el país: hemos aplicado más de 22 millones de dosis, esto significa que el 98 por ciento de nuestros adultos han quedado debidamente protegidos con su esquema completo y el 82 por ciento, ya cuentan además con un refuerzo adicional. Sobre esa base –la protección a la salud y la vida– se despliega todo lo demás.
Solo en febrero de este año, fueron creadas 20 mil 293 nuevas plazas laborales en el sector formal. Sumado a esto, de acuerdo con el INEGI, la Ciudad fue capaz de recuperar el nivel de su población ocupada al cierre del 2021, en un número mayor que los registrados meses antes de la emergencia sanitaria. Y más que eso: la creación de empleo en el sector de la construcción, muy importante para la Ciudad, se aceleró en marzo, a una tasa no vista en mucho tiempo, que ronda el 7.4 por ciento mensual.
Si bien el dato del empleo es uno de los que mejor resume las energías, la salud y las expectativas de una economía, no es el único. El sector de la construcción, que incide directamente sobre otros 48 sectores económicos, exhibe una recuperación notable: 19.6 por ciento de enero de 2021 a enero de 2022. En el mismo caso se encuentra el comercio, cuyo desempeño favorable ha permitido el repunte de sus ingresos totales en los últimos cuatro meses y la recuperación también ya se comienza a sentir en el sector turismo.
Son momentos de tomar decisiones para asegurar y acelerar la recuperación. Estamos tratando de cerrar un ciclo –el impuesto por una pandemia– para entrar a otro, promisorio y más dinámico, siempre inclusivo y sin ataduras.
Por eso, la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, ha puesto en marcha un triple paquete adicional que permitirá romper las inercias y ubicar a la Ciudad en una senda de crecimiento durante el siguiente trienio. Siempre de abajo hacia arriba, desde la economía popular hasta los proyectos para la inversión internacional, en tres direcciones.
Primero, apoyo a la economía popular, social y solidaria, mediante apoyo directo, subsidios y excepciones, el objeto es seguir apoyando de forma directa a la población más vulnerable y que todo pequeño negocio que cerró por la pandemia, vuelva a la economía real en estos meses, brindando todas las facilidades materiales, administrativas y financieras.
Segundo, con nuevos instrumentos de apoyo para el sector de la construcción y de vivienda vamos a detonar, en definitiva, los proyectos inmobiliarios a lo largo de distintos corredores estratégicos de la Ciudad. Con trasparencia, impulsando un desarrollo urbano incluyente dentro del marco normativo, mucho más que una “ventanilla única”, ejecutaremos un seguimiento puntual de los desarrollos y una reingienería de los organismos gubernamentales para que una Comisión Única haga cumplir todas las medidas de integración urbana y los desarrolladores tengan mayor certidumbre al obtener sus autorizaciones en un plazo no mayor de 60 días. A su lado, en 7 zonas y 18 corredores de la Ciudad –que incluyen a la Zona Rosa– hemos comenzado el vasto programa de vivienda incluyente para garantizar ese derecho fundamental de nuestra gente. Adicionalmente, vamos a reconvertir un gran número de oficinas y espacios fabriles, en vivienda asequible, fenómeno que por lo demás, impuso la pandemia.
Tercero: relanzar el sector turístico y cultural en la Ciudad, para que trabaje ya al 100 por ciento de su capacidad. Todos los eventos, restaurantes, hoteles o paseos, restablecerán sus actividades; volveremos a realizar grandes eventos, acompañados del lanzamiento de campañas de promoción y cuidado. Se trata de reincorporar plenamente a este sector crucial de la vida capitalina.
No hablamos de proyectos, todo lo narrado aquí ya está en marcha y forma parte de un paquete de acuerdos cuidadosamente elaborados con el sector social y con los organismos empresariales. Cada proyecto tiene nombre y apellido y responsables de seguimiento, con la Jefa de Gobierno en primer lugar.
El propósito es claro: la Ciudad debe recuperarse y dejar atrás los estragos económicos de un meta-evento que nos tocó enfrentar en todos los terrenos. En esta ciudad no hay dilema, la economía social y popular, así como el desarrollo de sectores como el de la construcción, deben ser impulsados por igual, y para todos.
Ahora disponemos de estas palancas y esta voluntad para seguir adelante y embarcar a la Ciudad en un renovado trienio, más optimista, de crecimiento. Esta ciudad innovadora y de derechos ya no se detendrá, está lista para reemprender su crecimiento y para compartir entre todos, los frutos de la prosperidad.