Colaborador Invitado

¿Qué papel juegan las aseguradoras frente al cambio climático?

Las aseguradoras son especialistas en analizar, gestionar y mitigar riesgos, además de tener datos robustos sobre los efectos que causan los fenómenos naturales.

El cambio climático nos sigue afectando este año, con olas de calor en Europa, sequía en el norte de México, inundaciones en Pakistán o huracanes devastadores. La literatura sobre el impacto que tiene el cambio climático en la población es extensa; en esta columna me gustaría tratar el papel de las aseguradoras.

Desde hace varios años, las aseguradoras y reaseguradoras han analizado el riesgo que el cambio climático tiene para el planeta y la sociedad. SwissRe, por ejemplo, afirma haber identificado este riesgo desde 1979 y desde entonces lo analiza. Existen alianzas de aseguradoras que se comprometen a reducir o a eliminar los gases de efecto invernadero. La más conocida probablemente es la agrupación Net-Zero Insurance Alliance, cuyos 29 miembros representan 14 por ciento de las primas a nivel mundial. Está patrocinada por la ONU y tiene como principal compromiso que el portafolio de seguros de cada compañía miembro, tenga cero emisiones de gases invernadero en el año 2050.

La razón de este interés es doble: por un lado, las aseguradoras son especialistas en analizar, gestionar y mitigar riesgos y por otro, las compañías de seguros tienen datos robustos sobre los efectos que causan los fenómenos naturales. Además, las aseguradoras cubren las consecuencias de catástrofes naturales cuyos costos tienen una tendencia al alza: en el año 2021, las catástrofes naturales causaron pérdidas de 280 mil millones de dólares, de los cuales 120 mil millones fueron asegurados; fue el segundo año más costoso después de 2017. Las estimaciones sobre el impacto del huracán Ian en Florida y Carolina del Norte en la última semana de septiembre son alarmantes. No solo fallecieron más de cien personas, sino que los daños causados por viento e inundaciones podrían alcanzar los 100 mil millones de dólares. De estos, hasta 63 mil millones de dólares podrían estar cubiertos por aseguradoras privadas. En México las aseguradoras ofrecen a sus clientes coberturas contra eventos como huracanes o inundaciones, pero también contra las consecuencias de sequías.

En este sentido, las aseguradoras tienen tres palancas para combatir el cambio climático:

1. Inversiones. En AXA México, cada inversión que realizamos sea en el sector privado o público, es analizada respecto a la intensidad de carbón y otras variables de medio ambiente, de sustentabilidad y de gobierno corporativo (ESG por sus siglas en inglés). Los resultados los compartimos con los emisores para sensibilizar que es un criterio importante a la hora de decidir sobre sí o no asignamos recursos.

2. Productos de seguros. Podemos incentivar a los clientes para que apuesten por energías renovables, economías circulares y acciones de sustentabilidad. En nuestra operación incluimos acciones como la digitalización para evitar entregar pólizas en papel o tarjetas de plástico. Nuestros productos incluyen coberturas que motivan conductas sostenibles. Un ejemplo son los paneles solares que en una póliza de hogar están automáticamente cubiertos contra daños materiales a consecuencia de incendio, explosión, corto circuito, entre otros; en el área de siniestros, existe la oportunidad de reparar autos siniestrados con refacciones de segunda mano.

3. Finalmente, la tercera palanca son nuestra flota de autos, nuestros inmuebles y nuestra infraestructura tecnológica. Los autos de AXA México ya son híbridos, los edificios cuentan con energía limpia y con la certificación Leed, pretendemos ser una compañía paperless y las aplicaciones tecnológicas las estamos migrando a la nube, lo que es más eficiente que un centro de datos convencional.

AXA publicó este año por séptima vez su reporte sobre clima y biodiversidad. En más de 80 páginas el documento fija nuestros compromisos como empresa global, nuestras acciones en beneficio del planeta y cómo hemos reducido el impacto en cuanto a energía, agua y emisiones de CO2. Los empleados juegan un papel importante: a nivel mundial 80 por ciento de los colaboradores han cursado una capacitación de más de dos horas sobre cambio climático, pérdida de biodiversidad e impacto sobre la vida diaria. En México, más de 90 por ciento de nuestros cinco mil empleados lo han cumplido. Finalmente, las metas de sustentabilidad de nosotros, los ejecutivos de AXA son un factor importante para determinar nuestra remuneración variable.

El cambio climático nos debe preocupar a todos. La industria aseguradora juega un papel relevante. Desde AXA, a nivel mundial como en México, seguiremos contribuyendo a combatir el incremento de las temperaturas, a mejorar la calidad del aire y a mantener la biodiversidad.

Daniel Bandle es director general de AXA México.

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