El término NFT está en boca de todos los círculos financieros, y ha alcanzado una gran popularidad entre los inversores, pero todavía hay algunos escépticos que aún tienen resistencia a incursionar en este mundo de activos digitales al no entender cómo funcionan y el valor que tienen en el sector.
¿Qué tiene de diferente un NFT de otros activos digitales? Y ¿por qué es tan popular en ciertos sectores? Para poder hablar con propiedad de un NFT (Non Fungible Token) en primer lugar hay que tomar en cuenta que al ser un bien No Fungible, quiere decir que su valor cambia dependiendo a quién pertenece, cómo se obtiene y las variantes de valor que va adquiriendo con diferentes actividades, lo que lo vuelve en un bien dinámico y que atrae a diferentes grupos de personas. Es decir, si hay NFTs de un artista en específico, es mucho más probable que los fanáticos de ese artista se vuelquen por ese activo. En esta línea, en el mercado financiero crea un efecto interesante al impulsar que diversos sectores de la población incursionen en el sector debido a gustos, hobbies y preferencias, y son personas que probablemente de no existir los NFTs que les llaman la atención, no participarían.
Pero un NFT es mucho más que un objeto no fungible. Al tener la cualidad de ser un token, presumimos que es un objeto que tiene valor en cierto contexto o para determinada comunidad, aunque su propia esencia no contenga ese valor en sí mismo.
Si unimos ambos conceptos, se hace la magia y podemos entender el valor del NFT en toda su magnitud. El NFT nos va a permitir certificar la propiedad de un activo, bien sea físico o digital. Al ser tan especial, único e irrepetible tiene unas cualidades que no pueden ser replicadas. Y aquí entra la madre de todas las cosas en el mundo cripto, la tecnología Blockchain. Porque este NFT, se va a ubicar en una Blockchain concreta construida y apoyada en un contrato inteligente donde, sin intermediarios, se crea el acuerdo entre 2 o más personas para acordar el valor.
De acuerdo a esto, existen bastantes usos que se le pueden dar a estos activos digitales, los más utilizados son el sector de los videojuegos y el arte. Considero que históricamente, los artistas han luchado por proteger sus derechos de autor y obtener una compensación justa por su trabajo en línea. Sin embargo, con los NFTs, ellos mismos pueden certificar la propiedad única de sus obras digitales, lo que les permite establecer una relación más directa con sus compradores y rastrear la autenticidad y la procedencia de cada pieza. Esto ha abierto nuevas puertas para artistas emergentes y ha democratizado la industria del arte, ofreciendo oportunidades a aquellos que anteriormente se enfrentaban a barreras insuperables.
A través de esta forma de certificar la propiedad, objetivos virtuales como armas o materiales dentro de un juego de PC permiten al usuario poder intercambiar el objeto de forma sencilla, pudiendo demostrar en todo momento la autenticidad y muchas de sus características únicas. Por otro lado, en el mundo del arte, está permitiendo avanzar y descubrir nuevas posibilidades a nivel creativo. No es raro encontrar a la venta objetos digitales al 100 por ciento certificados y exclusivos. Pero no sólo en estos sectores está avanzando y creciendo la usabilidad de los NFTs. En esta línea, la adopción de los NFTs es cada vez mayor al encontrarse en diferentes sectores como la logística, propiedad intelectual, la fe pública certificada y el deporte.
Desde mi opinión los NFTs son claramente el futuro, las ventajas comparativas respecto a los inconvenientes dan lugar a un balance muy descompensado a favor de las primeras. Pero hay que tener en cuenta un dato, que ahora mismo pesa como una losa negativa en los NFTs, ya que no están aun plenamente desarrollados en cuanto a regulación. Hasta que esta no sea una realidad homogénea a nivel internacional en cuanto a un ordenamiento jurídico común, existirá mucha incertidumbre teniendo en cuenta la aplicación de leyes y fiscalidad en la operativa y mercadeo de estos objetos.
Sin duda, los NFTs son una opción interesante y poco convencional para adentrarse en el mundo de los activos digitales. Sin embargo, queda por delante un camino largo para que sean reconocidos con más seriedad en el mundo de las inversiones comunes, como lo pueden ser ya las criptomonedas.
*El autor es trader profesional desde hace más de 10 años. Ha sido colaborador y escritor de artículos sobre trading para diversos medios del sector.