Estamos viviendo tiempos de cambios significativos en todo el mundo, cambios que están redefiniendo la manera en la que las empresas funcionan y hacen negocios. En el corazón de estas nuevas tendencias se encuentra la Inteligencia Artificial (IA), una herramienta que llegó para quedarse y que está destinada a ser un socio vital en el funcionamiento y liderazgo de cualquier empresa.
La IA se ha convertido en un elemento transformador y estratégico para empresas de todos los tamaños y sectores. Por mencionar algunos datos: De acuerdo con estimaciones de la firma McKenzie, el impacto por el uso de la IA generativa, (la base de ofertas como ChatGPT o Bard) supondrá un aumento de la productividad de entre 2.6 y 4.4 billones de dólares anuales en el mundo.
De acuerdo con el Foro Económico Mundial, se prevé que los servicios de IA en el sector retail pasen de 5 billones de dólares a más de 31 billones en 2028. En tanto, la firma Grand View Research, estima que el tamaño del mercado mundial de la Inteligencia Artificial en la atención a la salud se valoró en 15.4 billones de dólares en 2022 y se espera que incremente a una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 37.5% de 2023 a 2030. En este sector en específico, el manejo de datos digitales de los pacientes, la creciente demanda de medicina personalizada y la necesidad de reducir los gastos de atención, son algunas de las principales fuerzas impulsoras del crecimiento del mercado.
Ante este escenario, es crucial para los líderes empresariales entender y abrazar el potencial transformador de la IA para permanecer competitivos. Que quede claro, hoy por hoy la verdadera pregunta NO es si la IA en sí misma sustituirá o no a los seres humanos sino que compañías ya la están usando para diferenciarse. La IA es y será clave para impulsar nuestros negocios hacia adelante, mejorar la eficiencia y la productividad y ofrecer un mayor valor agregado a nuestros clientes.
Es importante tener claro que la IA no es un sustituto de los líderes y su intuición; es más una herramienta que los empodera proporcionando información en tiempo real para enriquecer la toma de decisiones. Puede procesar vastas cantidades de datos en cuestión de segundos, identificar tendencias emergentes, prever resultados y ofrecer recomendaciones precisas.
Si bien es importante abordar las preocupaciones legítimas sobre la privacidad de los datos y la ética en el uso de la IA, no debemos perder de vista los innumerables beneficios que ofrece. La hiper automatización por ejemplo, permite que las empresas liberen a su personal de tareas repetitivas y administrativas, permitiéndoles enfocarse en actividades más creativas y estratégicas. Esto se refleja en una fuerza laboral más comprometida.
En este nuevo paradigma empresarial, los líderes que entienden la importancia de la IA estarán en una posición sólida para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades que se presenten. La IA ya está entre todos nosotros y quienes la abracen con visión y determinación serán los líderes del futuro.